‘Amar es para siempre’ dijo anoche adiós a la audiencia tras 9 temporadas. La histórica serie de Antena 3 con más de 2.800 episodios, cierra su andadura en la pequeña pantalla, con un 11,7% de cuota en ‘prime time’ en el último capítulo y con más de un millón de espectadores. Pese a quedarse por debajo de otro programas de la misma franja horaria, la producción quedará en el recuerdo de muchos.
En el último capítulo de la serie emitido ayer, miércoles 6 de marzo, giró en torno a ‘El Asturiano’ y otros entresijos familiares, así como el esperado evento de la reboda de Manolita (Itziar Miranda) y Marcelino (Manu Baqueiro), pero fue emitido en la franja de tarde.
El final de la última entrega de ‘Amar es para siempre’ estuvo marcado por un final emotivo. Sobre todo en el caso de Miranda, Baqueiro y José Antonio Sayagués, el eterno Pelayo, personajes característicos de esta ficción ya mítica de la televisión española.
El último episodio
En el último capítulo, Luisita, al ver que Pelayo está a punto de morir, llama a sus hermanos para decirles lo que ocurre con el abuelo. Alertados por la noticia, todos viajan inmediatamente a Madrid para despedirle.
Al llegar a casa de Marcelino y ver a su familia, los hermanos ven que todo ha sido un malentendido y que el abuelo está en plenas facultades. Algo que alegra a estos, todos ellos reunidos, a excepción de Luisita, que se encuentra enferma de una varicela.
En es preciso momento, Pelayo reúne a sus familiares y les desvela su decisión de jubilarse y heredarle el Asturiano a su hijo Marcelino. Más tarde, y tras conocer este anuncio, Marcelino y Manolita renuevan sus votos en una boda íntima en compañía de sus siete hijos.
Acto seguido, Luisita entra en escena y felicita a sus padres por el evento. Así, el reencuentro familiar sirve para reunir a los Gómez Sanabria y ver que no todos son tan felices como creían, comprendiendo que para enderezar sus vidas deben regresar a casa.
Su relación con ‘Cuéntame cómo pasó’
Pablo Fajardo, el director de ‘Amar es para siempre’, revela en una entrevista algunos paralelismos que guarda la producción con ‘Cuéntame cómo pasó’: "Hay elementos comunes. Escribimos el final en septiembre, y se rodó el octubre. El final de ‘Cuéntame cómo pasó’ se emitió en noviembre, explica.
“No teníamos ni idea de cómo acabaría. Sí que es cierto que tenían lo de la novela de Carlitos por ahí, pero no sabíamos cómo le darían cierre. Es verdad que tenemos muchos paralelismos, pero creo que están abordados de forma muy diferente”, relata Fajardo.
“’Amar’ y ‘Cuéntame’ tienen muchos vasos comunicantes, en cuanto al tipo de serie que son, el período que tratan, la filosofía de la serie... Entonces me parece lógico que llegáramos al mismo punto, porque la historia te va llevando ahí”, cuenta el director.
Para él, otra clave reside en “la vocación de contar la historia de España” a través de una familia que va traspasando a lo largo de generaciones: “Para mí tiene cierta lógica que acabáramos llegando al mismo sitio”, señala el guionista.
Serie sucesora
A pesar de este sonado adiós, no todo son malas noticias para los seguidores de este tipo de ficciones. De hecho, la serie ‘Sueños de libertad’ ocupará el vacío dejado por ‘Amar es para siempre’, también emitida en la cadena de Atresmedia.
Esta producción trata sobre las aventuras de Begoña Montes, (Natalia Sánchez), una mujer envuelta en un matrimonio tóxico que peleará por lograr la libertad en la España de la década de los años 50.
