En esta semana, Ángeles Béjar, la madre de Luis Rubiales, ha tenido que ser enviada al hospital de Motril tras sufrir una crisis de salud derivada de la huelga de hambre que emprendió en defensa de su hijo.
Al conocerse su traslado a dependencias sanitarias, José Domingo Bueno, reportero del programa de Telecinco ‘Así es la vida’, preguntaba el pasado miércoles a los vecinos del pueblo sus opiniones sobre lo sucedido. Lo que no esperaría es que, mientras trabajaba, viviría un desagradable momento.
El periodista, con intención de recabar diversos testimonios acerca del encierro y huelga de hambre que vivió Ángeles Béjar en la iglesia del municipio granadino, decidió preguntar a una vecina del pueblo.
Nada más ser interpelada, esta aclaró que desconocía algunos detalles, a la vez que mostraba nula empatía hacia Jenni Hermoso. Así lo manifestaba la mujer en plena entrevista: “No es normal que crucifiquen a un hombre que ha llevado a España a ganar la Copa del Mundo, mierda. ¡Pero que miréis eso más bien que ir detrás de él por un piquito!”.
Tras estas palabras, añadía: “A ver, te voy a dar un piquito a ti”, acercándose a Bueno para besarle los labios, a lo que este se apartó para que ella no consiguiese llevar a cabo este gesto, sin consentimiento alguno.
Después de esta vergonzosa escena, la desconocida continuaba diciendo: “Yo puedo hacerte todo lo que quiera, soy una mujer. Como cogerte de los huevos si quiero, ¡mira! ¿Y un hombre no puede? Pobre...".
Asimismo, la defensora de Luis Rubiales volvió a aproximarse al reportero para tocar sus genitales, y este logró esquivarla. Al terminar esta surrealista y bochornosa situación, José Domingo Bueno quedaba completamente atónito, remarcando que se estaba "minimizando un acto tan inapropiado" como besar a alguien sin su consentimiento.
Huelga de hambre
Ángeles Béjar, la madre de Luis Rubiales, el presidente suspendido de la RFEF, pidió justicia para su hijo encerrándose e iniciando una huelga de hambre en la iglesia de Motril. No obstante, después de pasar allí tres días, tuvo que ser trasladada al hospital Santa Ana de la localidad granadina. Esta presentaba una grave hinchazón en las piernas, así como un notorio malestar físico.
A pesar de que la mujer iba a comparecer el miércoles ante los medios de comunicación para informar sobre su estado de salud, fue el cura de la parroquia quien lo hizo en su lugar, explicando que Ángeles Béjar estaba "muy cansada y con mucha conmoción, no solo a nivel anímico. Tenía angustia y estaba mareada". Actualmente, la madre de Luis Rubiales se encuentra en su domicilio recuperándose.