MADRID - Se considera un afortunado en el amor y también en el trabajo. Cuando se le pregunta por Operación triunfo, él fue su primer presentador, se muestra diplomático y reservado, no lo ve, no lo sigue y cuando se pone ante la televisión ve la parrilla de Mediaset, el grupo con el que ahora trabaja.

Segunda edición de este reality, parece que ha gustado usted para este programa.

-Me imagino, no estaríamos hablando tú y yo de no haber gustado la primera vez que lo hice. Yo estoy feliz, me gusta este trabajo y creo que a los espectadores también. Lo disfruto.

Me parece un poco viejo lo de ‘Granjero busca esposa’, quedaría mejor ‘busca pareja’, ¿no le parece?

-No sé, ya no depende de mí, el programa se ha llamado siempre así.

¿Y cree que a estas alturas es creíble que se busque pareja a través de la televisión?

-Nos vamos a los sitios rurales donde hay gente muy natural, encantadora. Los granjeros, los pobres, viven a veces en zonas aisladas donde hay pocas oportunidades de conocer a chicos y chicas. Pero te voy a decir una cosa, hay tanta gente que busca esposa...

¿Se siente bien haciendo de ‘celestino’?

-Feliz, encantado de la vida. Todo lo que sean concursos y realities y trabajar con gente me apasiona. Vuelves a casa con la alegría de saber que has hecho un bien para ellos. Los granjeros me ha agradecido que les haya ayudado tanto durante las grabaciones, también en las decisiones que han tomada en un sentido u otro. Los pobres están muy cortados.

Bueno, pero aceptan ponerse delante de una cámara y mostrar, se supone que sinceramente, sus sentimientos.

-Te lo digo yo están muy cortados y a mí me gusta todo lo que sea ayudar a la gente. Para hacer este tipo de cosas te tienen que gustar las personas. Siempre trabajo para la gente y gracias a los que me ven tengo trabajo.

Antes de hacer su primera edición de ‘Granjero busca esposa’ hubo un parón en su carrera, se perdió la pista de usted.

-Llevo 33 años en este mundo de la televisión, ya se sabe cómo son las cosas.

¿Cómo son esas cosas?

-Cambios de directivos, movimientos de fichas, uno se equivoca a veces y poco a poco vas saliendo del escenerio. Me fui a Perú, allí encontré el amor, a mi novia, llevo dos años y medios con ella. Tuve la suerte de trabajar en ese país. Estuve dirigiendo una serie, hice otra de protagonista, hice un programa de televisión y un musical... Hice amigos, me fue de maravilla.

¿Y por qué volvió?

-No descarto volver, pero tampoco en cualquier país del mundo; si te gusta trabajar en este medio, tienes que estar en todos los sitios donde te den trabajo. Vine a Madrid a pasar las Navidades y me ofrecieron entrar en la casa de Gran hermano vip.

Y decidió ponerse al otro lado de la barrera, de presentador de ‘reality’ a concursantes. ¿No le pareció una decisión arriesgada?

-Me apetecía que la gente me conociera más como persona, como presentador ya me conocían. Me fue muy bien, me lo pasé de maravilla y me premiaron con un premio mejor que el maletín, un programa de televisión. Además, ahora repito, qué voy a decir: ¿una decisión arriesgada? Creo que no, fue una decisión acertada.

¿Nunca ha tenido que buscar el amor en televisión?

-No me ha hecho falta, he tenido mucha suerte en la vida...

¿Seductor?

-Ja, ja, ja... No sé qué decirte. Hoy por hoy, no lo he necesitado; tampoco lo descarto y a lo mejor me ves mañana buscándolo. Ahora tengo novia, me va muy bien. Hay que ser sincero y no tener ningún tipo de vergüenza para buscar cualquier cosa que te haga falta, aunque sea en televisión, pero no solo amor. No me ha hecho falta buscar pareja en televisión, pero sí que la hubiera buscado en televisión en caso contrario.

Vamos a cambiar de ‘reality’, hablemos de ‘Operación triunfo’. ¿Lo sigue?

-Voy a ser sincero, no lo sigo, de vez en cuando hago un zapping y lo veo un poco.

¿Resentido?

-En absoluto. Fue una etapa preciosa en mi vida y me gustó mucho vivir esa experiencia. Veo los programas de Mediaset porque es el grupo con el que trabajo. Qué te voy a decir de Operación triunfo, fueron mis ediciones las que más me han gustado, no te puedo decir otra cosa. No es resentimiento, tampoco dejar el pasado atrás. Yo deseo a la productora y a Televisión Española lo mejor, espero que sea un éxito, pero yo juego en otra liga, no soy parte de ese equipo.

¿Esperaba que se hubieran puesto en contacto con usted para ofrecerle algún tipo de colaboración?

-No, yo estoy en otra cadena y no creo que hubiera colaborado con ellos. Si me hubieran pedido algún consejo lo habría dado, pero no ha hecho falta. Los responsables de este programa lo han querido hacer a su manera y les deseo toda la suerte del mundo. De mi Operación triunfo, yo me quedo con mis recuerdos bonitos con mi Rosa, mi Bisbal, mi Chenoa... Este es un programa para que los chicos que están en él y tienen ilusiones las consigan, espero por ellos que les vaya muy bien y tengan mucho éxito como lo tuvieron los míos... Poco más puedo decir.

¿Qué destacaría del ‘Granjero busca esposa’ de esta temporada?

-Todo es novedad, hay que verles. Date cuenta que aunque pueda parecer el mismo formato, cambian los protagonistas. Tenemos a Facundo que es el primer granjero gay del programa; tiene una legión de fans y seguidores. El tío es un gamberrete. Está también Patricia, una emprendedora maravillosa, es una tía muy recta, muy firme; a mí me gustan mucho las mujeres valientes y con fuerza. Hay que imaginarse lo que puede ser para una mujer vivir en un mundo de machitos.

Tendría que estar superado, ¿no?

-Pero sabemos que no está superado, que aún faltan mucho para superar ciertas situaciones.