MADRID. Los internautas han atacado ferozmente esta nueva campaña afirmando que esta producía una distorsión de la imagen de la mujer. Según varios medios, la modelo tendría una talla M y no una XL como se supone. La propia Myla mostraba su indignación por la polémica levantada en una entrevista: "Soy una mujer grande, no la más grande del mercado, pero soy más grande que las chicas con las que la marca ha trabajado".