Madrid. "Un programa de humor basado en hechos reales" es el lema del espacio Así nos va, con el que Florentino Fernández y Anna Simón debutarán el próximo lunes en la sobremesa de La Sexta, "un proyecto complicado" por ser muy abierto, explicó ayer el cómico.

"Queremos fijarnos en los que nos rodea, sin ser ni derechas ni de izquierdas, en un formato en el que quepa el humor, la ironía y el sarcasmo", añadió en el plató del programa Fernández, que vuelve a probar suerte junto a Anna Simón en un formato similar a Tonterías las justas (Cuatro), aunque ahora en un tono un punto más reflexivo.

A los reportajes y análisis críticos de las noticias más destacadas, que permitirán a Anna Simón poner en práctica el trabajo "más periodístico", se sumarán los doblajes de películas y las parodias de personajes "marca de la casa", es decir de Flo, como el de Buenafuente, Gloria Serra o Alberto Chicote.

Así nos va, que intentará sumar un público "más maduro" a los jóvenes incondicionales de Tonterías las justas, según Simón, contará también con secciones como cámaras ocultas y debates.

Fernández no cree que su nuevo espacio vaya a pisar los temas a El intermedio, que en las últimas semanas no deja de incrementar su audiencia haciendo humor de la política, y ha asegurado que "el abanico" de su programa "es mucho más amplio, y puede tratar desde temas sociales al cine o el entretenimiento".

El espacio tendrá también su momento de zapping televisivo, cuestiones curiosas de internet -entre ellas las peores ofertas de trabajo de España- y conexiones con la calle, secciones de las que se ocupará un grupo de colaboradores formado por Adriana Abenia, Sergi Mas, Marta Márquez, Nene y Eva Cabezas.

El vidente Sandro Rey aparecerá al frente de la sección Así nos irá..., con predicciones de política, economía y deportes, entre otros temas. El director de antena de La Sexta, Mario López, ha explicado que a la cadena le faltaba un "apuesta consolidada" en la sobremesa, un horario complicado como prueba la reciente retirada del programa Alguien tenía que decirlo por sus bajos resultados.