EL El FestVal de Vitoria-Gasteiz ha servido de escaparate de las producciones y de foro de los profesionales. Por allí se pasó Paolo Vasille que es el que más sabe de televisión a este lado del Mediterráneo. En el foro aseguraba que no hacía falta ser muy listo para ver que no había sitio para cuatro cadenas generalistas. Lo decía muy convencido de que todas las decisiones políticas que se han tomado en este negocio fueran contra él. Los Vasile que dominan el negocio de la tele se cuentan con los dedos de una mano. Llevan tanto tiempo que es muy difícil hacerles ver que existe otra manera de hacer las cosas además de que Ana Rosa hurgue de par de mañana en todas las heridas y luego ya Jorge Javier y sus huestes las abran en canal y nos cuenten todos los chismes y entre medio Jesús Vázquez nos dé un respiro con cualquiera de los formatos de concursos de los que es capaz. En parte la competencia le ha dado la razón: ahora Antena 3 amenaza con dar más de lo mismo. Se dice que hizo volver a Susana Grissó de las vacaciones con el caso de Ruth y José y todo ese embrollo policial y judicial. Ahora Antena 3 tiene a Carlos Sobera como hombre concurso que lo mismo apuesta por un roto (Atrapa un millón) que saca adelante un descosido (Avanti).
La experiencia del FesTVal de 2012 es un paso a delante que lo consolida en el maltrecho panorama que vive la producción televisiva, capaz de cancelar series que serían éxitos asegurados y guardar un año entero otras como Isabel que ayer estrenó TVE. Vasile agradeció a su distinguida concurrencia de Vitoria "que no le insultaran" ni le mentaran la telebasura. "Una TV no puede ir bien en un país que va mal" añadió. También puede que a los países les vaya yendo peor cuanto peores son sus medios; incluida la televisión que apuestan por, vale Vasile llámale morbo en lugar de... .
