Vitoria. El programa Salvados, de LaSexta, dirigido por Jordi Évole, más conocido como El Follonero, batió el domingo su récord histórico de audiencia al registrar un 9,6% de cuota de pantalla con su entrega titulada Que Dios te lo pague, espacio en el que Évole se trasladó a la Comunidad foral para denunciar la actuación del Arzobispado, acusado de inmatricular bienes para posteriormente revenderlos.
Gracias a este dato, LaSexta superó a Antena 3 (6,8%) y a Cuatro (5,2%), y se situó a escasa distancia de Telecinco (10,7%). El programa de Jordi Évole también registró una de las entregas más vistas de su trayectoria, al reunir a una media de 1.826.000 espectadores con su análisis sobre la financiación de la Iglesia en España. Durante su emisión, LaSexta fue la cadena privada más vista por el target comercial (11,7%) y se posicionó como líder absoluta en el Core TC (13,8%), los públicos de mayor interés para los anunciantes.
El minuto más visto se produjo a las 22.07 horas, coincidiendo con el momento en el que Jordi Évole hablaba con un vecino de la localidad navarra de Ziriza sobre las inmatriculaciones de la Iglesia. En ese instante estaban viendo LaSexta 2.652.000 espectadores. La audiencia acumulada por laSexta durante la emisión del programa superó los 4,8 millones de espectadores (4.827.000).
Pero el programa de Jordi Évole estuvo marcado por un especial sabor navarro, ya que el Follonero se trasladó a la Comunidad foral, donde la actuación del Arzobispado hace tiempo que está en el centro de la polémica. Évole se reunió, entre otros, con Pascual Larumbe, de la Plataforma por la Defensa del Patrimonio Navarro, quien explicó que la Iglesia lo que hace es aprovecharse de la existencia de una ley hipotecaria heredada del franquismo que fue ampliada en 1998 por el Gobierno de Aznar. "Esa ley equipara a la Iglesia con el Estado, la provincia, etc., a la hora de inmatricular bienes". Así, el Arzobispado navarro ha obtenido 1.087 propiedades de 1998 a 2007.
Évole también habló con el diputado socialista Juan Moscoso, que pide una separación total entre Iglesia y Estado. Moscoso criticó la gestión de Zapatero en las relaciones con la Iglesia tras aumentar la cuota que recibía la Iglesia por marcar la casilla de contribución. "Dentro del partido socialista se pedía la separación de Estado e Iglesia pero a 'Zapatero se le olvidó'", remarcó. "La política tiene estas cosas, estas contradicciones", explicó.