Vitoria. A finales de mes regresa Consumidores. Carlos Sobera y Adela González volverán a conducir el prime time de los miércoles. Sobera a lo largo de la entrevista comenta cómo vivió su regreso a ETB tras la desaparición de Date el bote.

'Consumidores' se sale de su línea habitual. ¿Se ha sacado la espina del encasillamiento?

Es muy complicado decir que eres multifacético. Hay mucha gente que eso no lo soporta y que dice: ya está aquí el listo de las eras que sabe hacer de todo, que se vaya a la mierda. Tenía la necesidad de demostrar que soy un hombre de recursos. Pero no lo decía yo. Podía haber hecho Gran hermano y no quise. He elegido ser un hombre de concursos, pero puedo más. En tu periódico me dieron un palito diciendo: Qué hace un presentador como este, que es un gamberro haciendo un programa, teóricamente serio, como Consumidores. Fue un prejuicio, se dijo antes de que empezara el programa. Yo sé hacer un telediario perfectamente.

¿Sí?

Sí, otra cosa es que me aburra haciéndolo. Puedo presentar un programa de corte informativo como Consumidores perfectamente, lo que ocurre es que me gustan más otros formatos.

¿Por qué aceptó 'Consumidores'?

Porque era una apuesta arriesgada muy apropiada para una televisión pública. No hace ese programa ni Dios en este país y encima con un corte de trabajo muy distinto.

¿Bien pagado?

¡Qué dices! Muy mal pagado…

Pues hay quien dice lo contrario.

Pues no, pero ETB es mi casa. Esto no sé si lo saben en ETB, pero yo cobro menos que en canales pequeños. Por ejemplo, menos que en 7 Región de Murcia. Lo hago porque lo que busco en ETB no es el dinero sino otro tipo de historia. Siempre, incluso en los tiempos de mayor éxito profesional en Madrid, he vuelto a precios mucho más bajos.

¿Le dolió dejar 'Date el bote'?

Nunca comprendí que se retirara. Date el bote tenía un desgaste obvio, como lo tenían muchos programas históricos de ETB. Cuando tomaron la decisión recuerdo que les dije que los dieces y los onces que hacía en ETB los iban a echar de menos y los echaron de menos, nunca volvieron a tener esa audiencia. Creo que era un formato que se había ganado un hueco en el corazón del público y que hubiera merecido un par de temporadas más.

¿Era una franja muy competitiva?

Supercompetitiva, como es el mediodía. He tenido que competir con Arguiñano, el programa de María Teresa Campos, con Corazón, con De buena ley… Siempre ha sido una franja que estaba ocupada por programas con audiencia.

¿Sintió que le echaban de casa?

No te quepa la menor duda. Todo lo que empieza acaba aunque tenga un éxito tremendo, el último titular siempre será malo. Cuando llega la despedida es porque has llegado a unos límites de audiencia tan bajos que no hacen rentable el programa. Uno no se queda con eso, se queda con lo anterior.

¿Entonces, por qué le hizo daño esa despedida?

Como te digo, esa despedida es algo para lo que tienes que estar preparado. Pero hay formas distintas de hacer las cosas. Si el adiós de Date el bote se llega a producir en junio con el final de la temporada hubiera sido recibido como una despedida natural y borrón y cuenta nueva. Pero el hecho de que se produjera en plena campaña del mes de diciembre, hizo que esa despedida fuera traumática y a destiempo.

¿Mal sabor de boca?

Ha pasado el tiempo, pero sí, las cosas hechas de esa manera son las que causan mal sabor de boca y creo que el equipo y el programa se merecían salir de otra manera. Pero ya es agua pasada.

¿Pensó en no volver a ETB?

No. Entiendo que en ETB unos días tienes unos directivos y otros tienes otros. Unos días, los directivos son de izquierdas y otros de derechas; incluso dentro de un mismo partido, los directivos son de este pelo un día y al siguiente son de otro. Entiendo que ETB tiene que ser la casa de todos los que estamos en Euskadi y de todos los que sentimos Euskadi y no tiene sentido ser vengativo. Volveré siempre y cuando haya un proyecto que nos interese.

Y le convenció 'Consumidores'.

Pues sí. Me lo ofrecieron aquellos que habían puesto fin a Date el bote, no tengo ningún rencor hacia ellos, no tenía sentido tenerlo. Me pareció que era un buen producto y lo acepté encantado de la vida.

¿Qué le aporta 'Consumidores'?

A nivel profesional, mostrar una faceta diferente y mostrar al público que uno puede tener mucho sentido del humor, pero no por eso te tiene que faltar rigor para hacer otro tipo de historias. He aprendido mucho como consumidor.

¿Han hecho ustedes amigos con las comparativas entre marcas?

Cuando se decidió meter comparativas había miedo, pero yo creo que se acertó. A un productor de marca o a una firma no le hace gracia que te metas con ellos, eso es transparencia y favorece al consumidor.