Madrid. El 6 de octubre de 2009 Cuatro estrenó FlashForward, sólo doce días después que la ABC estadounidense. Esta serie, de la que hace un año se vaticinaba que sería la heredera de Perdidos, debutó como el estreno de ficción extranjera más vista en la historia de la cadena de Sogecable y reunió ante la pantalla a 2,7 millones de seguidores que marcaron un 14,3% de audiencia. Hoy, FlashForward está cancelada después de una única temporada. En EEUU acabó el 27 de mayo y han pasado casi siete meses desde que Cuatro emitió su décimo capítulo. Es cierto que la emisión también sufrió un parón en aquel país, pero fue sólo de tres meses y medio para que los guionistas se replantearan su trabajo.
El domingo, a las 22.30 horas -y tras el partido entre Brasil y Costa de Marfil-, llegarán los episodios 11 y 12 y está previsto que cada semana se emita una doble entrega de estreno. ¿Qué posibilidades tiene de reenganchar a sus antiguos espectadores (que bajaron hasta 1,6 millones en la despedida del 8 de diciembre), a pesar de programarse en el prime time de los domingos? A estas alturas parece que no muchas, a pesar de que previamente, a las 17.30 horas, se emitirán el Especial FlashForward: ¿Qué has visto? -que repasará todo lo sucedido desde el primer episodio- y el último capítulo ofrecido en Cuatro, titulado A561984. El punto de partida de la serie fue realmente espectacular, con un piloto apabullante. Durante dos minutos y 17 segundos, todos los habitantes del planeta se desmayaron -todos menos una persona- y tuvieron una visión de su vida seis meses después: un flashforward. "¿Y tú, qué has visto?", se convierte en una pregunta recurrente en todo el mundo. Además hay millones de muertos en accidentes y, por encima de todo, un gran misterio. El FBI, con el agente Mark Benford (Joseph Fiennes) al frente, investiga qué causó el desmayo y si puede repetirse. Con los recuerdos de todos los afectados se crea una gigantesca página en Internet, bautizada como Proyecto Mosaico. A partir de ahí empieza un proceloso desfile de policías, físicos, criminales, ecuaciones... mientras la acción se estanca en multitud de subtramas sin decidirse por ninguna.
Los guionistas empezaron a liarse y se detuvo la grabación. Esto dañó la reputación de la serie, ya en peligro después de que en la trama se introdujera la curiosa circunstancia de ¡miles de cuervos muertos en Somalia varios años atrás! Sin embargo, en esta ocasión ni productores ni espectadores fueron tan pacientes como con el oso polar de Perdidos y las ínfulas de crear una nueva serie de culto se esfumaron de repente, a pesar de que la segunda tanda de episodios recobró el interés (especialmente con las infiltradas en el FBI) y consiguió profundizar en el perfil de los personajes. Su público había pasado a otra cosa y engancharse a una serie de este tipo sin haber visto los capítulos anteriores no tiene mucho sentido. Su presentación como la sucesora de Perdidos perjudicó a una serie digna, aunque no brillante, y la elección de un reparto poco conocido tampoco ayudó a su consolidación. Entre unas cosas y otras, FlashForward, la gran esperanza de los upfronts de 2009, ha pasado a formar parte del 80% de las series estadounidenses que no supera la primera temporada.