El derrumbe del edificio de la calle Hileras en el centro de Madrid en el que han fallecido cuatro personas se inició por el colapso de la terraza de la quinta planta, afectando al forjado, lo que hizo que se desplomaran los forjados del resto de pisos hasta el sótano.
En declaraciones a los medios, el responsable de Guardia de los Bomberos de Madrid, Miguel Seguí, ha confirmado que en esa quinta planta donde se inició el derrumbe no estaba trabajando ningún obrero en el momento del siniestro.
En total, cedieron siete forjados con una altura de 50 metros, que provocaron una cantidad de escombros que en algunos lugares llegaron a los tres metros de altura.
Seguí ha apuntado como causa del derrumbe a una "suma de factores" que ya se están investigando, aunque ha preferido no apuntar a ninguna en concreto, porque eso será trabajo de los investigadores.
Seguí ha ofrecido declaraciones a los medios de comunicación en las inmediaciones del lugar de los hechos para explicar la intervención de los Bomberos de Madrid que, tras el derrumbe ocurrido sobre las 13.00 horas, tuvieron que inicialmente asegurar la zona de intervención ante posibles nuevos desprendimientos. En concreto, hubo que retirar elementos inestables que ponían en riesgo la zona de trabajo.
El jefe de Guardia de Bomberos ha explicado que, a pesar de estos riesgos, era obligatorio intervenir ante la posibilidad de que las cuatro personas que constaban como desaparecidas pudieran estar vivas. Finalmente, los trabajos de rescate desarrollados a lo largo de la noche y hasta las 3.00 horas lograron recuperar los cuerpos sin vida de estas cuatro personas.
El operativo, que contó con el apoyo de unidades caninas de búsqueda, se enfrentó a una acumulación de hasta tres metros de escombros en una superficie de unos 50 metros cuadrados, lo que equivaldría a unos 150 metros cúbicos de materiales compactados que obligaron a los bomberos a retirarlos a mano, según ha explicado el propio Seguí.
Consultado sobre la posibilidad de que hubiera más personas atrapadas entre los escombros, el jefe de Guardia de Bomberos ha señalado que este extremo está descartado. Ha añadido que los perros de búsqueda empleados en la víspera en el dispositivo de rescate marcaron "de manera certera" la ubicación de los cuatro cuerpos y ya en la última pasada "no detectaron nada".
UN EDIFICIO EN "OBRAS DE MEJORA ESTRUCTURAL"
Respecto a las posibles causas del siniestro, Seguí ha señalado que el edificio se encontraba en obras de mejora estructural para un cambio de uso, pero ha abundado en que la investigación de los hechos corresponde a la Policía Científica, que ya en la víspera adelantó que analizaba lo ocurrido como un accidente laboral.
"Es una suma de factores. Estaban trabajando sobre una estructura antigua, retirando tabiques y modificando cargas", ha relatado Seguí, que sin embargo insiste en no aventurar las posibles causas del derrumbe, que en ningún caso parece amenazar la estabilidad de otros edificios colindantes.
El derrumbe se produjo en el forjado superior de la terraza de un edificio de seis plantas, y solo se han visto afectadas dos zonas centrales del forjado. "Quedan zonas inestables y elementos colgantes, pero el trabajo de rescate está finalizado", ha remachado. Los Bomberos mantienen en el lugar un retén de apoyo técnico mientras que la Policía Científica y los técnicos de control de edificaciones llevan a cabo las comprobaciones estructurales necesarias.