Buscar médicos hasta debajo de las piedras. Ese es el objetivo de Osakidetza que ha presentado en Madrid sus planes para atraer profesionales a la sanidad pública. Así, el consejero de Salud, Alberto Martínez, asegura que “buscaremos MIR allá donde estén”.

Por ello, pone sobre la mesa las condiciones que ofrece Osakidetza a los residentes que acaben este año para hacer más atractivo trabajar en el sistema vasco de salud, con sueldos base de 56.629 euros al año, al que hay que añadir antigüedad, complementos de hospitalización y autoconcertación.

Entre otras condiciones laborales, Euskadi ofrece contratos de larga duración, hasta tres años dentro del Programa de Rejuvenecimiento y Fidelización o cobertura de las plazas vacantes que queden sin cubrirse en el último proceso selectivo. Al igual que 28 días laborables de vacaciones más seis días de asuntos particulares.

Quizá por estas razones, la OPE para plazas díficiles de cubrir, cuyo plazo de inscripción termina el 30 de abril, acumula ya 657 personas interesadas.

"NO RECIBIMOS EL FEEDBACK DE NADIE"

Martínez lamenta la falta de respuesta a las propuestas de Euskadi para paliar la falta de médicos, que considera uno de los mayores retos del Sistema Nacional de Salud, y que “no puede resolverse” con un aumento de las plazas de Formación Especializada. “Nosotros estamos insistiendo, pero tengo la sensación que lo hacemos casi en una sala vacía, porque no recibimos un feedback de nadie”, protestó.

Consciente de que el déficit de médicos ahoga la Atención Primaria, el máximo titular sanitario corroboró que “tenemos un déficit de profesionales y esto afecta a la equidad del sistema".

"El médico puede elegir dónde trabajar y va a elegir el sitio que le sea más confortable”, afirma Martínez. Así, cita un estudio de la Universidad de Las Palmas en el que se afirma que el incremento de plazas MIR “no va a resolver” el déficit de profesionales, tras analizar el número de no incorporaciones, de no adjudicaciones, de renuncias y del número de plazas de residentes ofertadas.

500 MÉDICOS SE JUBILARÁN EN 3 AÑOS

Esta falta de médicos es lo que está generando más “tensión” en el sistema sanitario, que también se está viendo afectado precisamente por todos los profesionales que colgarán la bata en breve. “Hemos propuesto una preparación de jubilación porque en los próximos tres años, solamente en Euskadi, se jubilan más de 500 médicos de familia. Pero es que si vamos a cuatro años, la progresión es exponencial. Cada vez que se va avanzando el año, hay más personas en esas edades”, indica.

Por ello reclama al Ministerio de Sanidad que los R4 no tengan las “trabas” de la tutela en los últimos meses de la residencia para que puedan ser más operativos.

En relación a las jubilaciones, el consejero resalta que otro de los retos es hacer frente al continuo aumento de la esperanza de vida y al envejecimiento de su población.

“El envejecimiento que es un auténtico tsunami, porque no es un envejecimiento de una foto fija, sino que es algo que evoluciona y que hace que las personas tengan diferentes patologías, que requiramos diferentes servicios y además que tengamos que empoderar al paciente, porque tenemos que trasladar ese mensaje de que la sanidad del futuro depende de lo que se haga hoy”, ha puesto de manifiesto.

Otro elemento que afecta al SNS es la globalización, pues implica que cualquier enfermedad emergente o cualquier problema pueda llegar al país “en 24 horas”, lo que además facilita que puedan darse “grandes mutaciones” de los virus y derivar en una mayor dificultad del tratamiento de los pacientes.

“Esto obliga a que nuestro sistema tenga sistemas de vigilancia epidemiológica más fuertes que nunca, y vemos que a nivel internacional nos generan muchas dudas (...), a nivel nacional tendríamos que tener un gran sistema de vigilancia epidemiológica”, afirma el consejero vasco de Salud.

PACTO DE SALUD

Por todo eso, el Gobierno vasco ha establecido la salud como una “prioridad” y que se encuentra buscando “un pacto en salud” que suponga una nueva hoja de ruta que transforme y mejore el sistema, y la percepción que tienen los ciudadanos del mismo.

En este contexto, Salud ha convocado a más de una treintena de agentes, entre colegios profesionales relacionados con la salud, todos los sindicatos, todos los partidos políticos, asociaciones de pacientes, asociaciones de familiares de pacientes y universidades.

Con todos estos sectores ha iniciado una serie de reuniones, que ya avanzan en la tercera fase, y en las que han acordado los “principios y valores” que deben regir el sistema, todo ello tras realizar un “diagnóstico” sobre el mismo.