Euskadi está ganando habitantes a pesar de que el número de nacimientos no compensa las defunciones. Así, el pasado 1 de julio registró una población de 2.233.309 personas, lo que supone 11.722 más que el mismo día del año pasado, un incremento que obedece a la llegada de extranjeros.
Porque la población inmigrante lleva creciendo en la CAV de manera ininterrumpida desde 2014, con el paréntesis de la pandemia, mientras que los residentes de nacionalidad española se mantienen a la baja desde 2017.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha hecho pública la estadística continua de población poniendo de relieve que, de los 2.233.309 residentes en Euskadi, un total de 219.058 tienen nacionalidad extranjera. Estos son 10.368 más que el 1 de julio del año pasado, con lo que supone el 88,4% del incremento total de la población.
Y es que en un mundo cada vez más global, no dejamos de recibir gente. Hace dos décadas la inmigración en la CAV suponía el 3,2% de la población, pero desde entonces ha ascendido paulatinamente a cifras superiores al 12%, cuatro veces más.
REVOLCÓN DEMOGRÁFICO
En la demografía vasca se produce además otra paradoja. A diferencia de lo que sucede en la península, donde los ciudadanos entre 26 y 64 años nacidos en el resto del mundo, ascienden al 73%, en Euskadi hay más personas en edad de trabajar ya que supera esa media con un holgado 74%. Es decir, más de 163.000 adultos que han nacido fuera de nuestras fronteras pueden estar activos laboralmente. Los informes señalan que el 60% tiene empleo, la mayoría en el sector servicios.
En pleno revolcón demográfico, con la pirámide poblacional prácticamente invertida, y la sociedad muy envejecida, los jóvenes de fuera entre 15 y 29 años representan aquí el 15% de este colectivo juvenil.
Así las cosas, en el pasado semestre, Euskadi aumentó en 5.031 sus habitantes, ya que a 1 de enero de 2024 eran 2.228.278 los residentes.
Araba tiene 340.420 habitantes (337.508 hace un año) de los cuales 38.003 son extranjeros (1.652 más). Bizkaia 1.162.054 (1.156.314), con 109.173 extranjeros (5.539 más que hace un año). Los residentes en Gipuzkoa ascienden a 730.835 vs. 727.765. De ellos 71.882 tienen nacionalidad extranjera, 3.177 más que hace doce meses.
GRACIAS A LOS EXTRANJEROS
El crecimiento poblacional en todo el Estado, no solo en territorio vasco, sigue debiéndose al incremento de personas nacidas en el extranjero. En concreto, en el segundo trimestre de este año los nacidos en la península incluso se redujeron en 21.680, mientras los nacidos en otros países aumentaron en 89.047.
Mirando de nuevo a Euskadi, al dibujar el retrato robot de esta población según su continente de procedencia, las personas de países americanos suponen el 44% (3,3 puntos más que en 2022).
Los países de este grupo que más personas aportan son Colombia, Nicaragua, Honduras, Venezuela y Paraguay, que suponen el 29,6% del total de las personas de nacionalidad extranjera y el 67,1% de las personas con nacionalidad americana. Por sexo, más de la mitad de todos ellos son mujeres, según la información que maneja el Instituto Vasco de Estadística-Eustat.
MENOS JUBILADOS
Los datos del INE, también constatan que el País Vasco es una de las comunidades donde hay menos jubilados de origen extranjero, apenas un 5,4%. Mientras que en Canarias, los mayores de 65 años suponen el 13,8% o en la Comunidad Valenciana ascienden al 12,5%.
En el segmento etario de 15 a 24 años, el máximo se alcanza en Eskadi, donde el 13,3% de los residentes nacidos fuera de la península tienen esas edades, por delante de Nafarroa donde alcanzan el 12,8%.
Por lo que se refiere a los 13.654 menores no acompañados acogidos por los servicios autonómicos de protección a la infancia, la mayor parte de ellos están en Canarias, y en el caso de Euskadi, el número ascendía el pasado mes de julio a 723.
