Euskadi ha cerrado la Semana Santa con 1.056.000 desplazamientos en sus carreteras, lo que supone casi un 0,6% más que en este periodo en 2023. El número de accidentes, un total de 51, se ha reducido en un 43% con respecto al año pasado y no se ha registrado ninguna víctima mortal, según los datos hechos públicos este miércoles por la Dirección de Tráfico del Gobierno vasco.

En esta pasada Semana Santa, las carreteras vascas han registrado una media de 528.000 desplazamientos de entrada y otros tantos de salida, frente a los 525.000 del mismo periodo de 2023, lo que supone un ascenso de casi el 0,6%, "muy próximo a lo inicialmente previsto" y que habría sido mayor "de no ser por la inestabilidad de la climatología", han señalado desde Tráfico. Así, en 2023, con tiempo soleado, el incremento respecto a 2022 fue del 2%.

El paso fronterizo de Biriatou es donde más se ha notado el aumento de los desplazamientos, con casi un 1,2% más que el año pasado. En este caso, destaca que el partido de rugby entre el Aviron Bayonnais y el Toulon, disputado el 31 de marzo en el Reale Arena de Donostia, "atrajo a muchos aficionados de Iparralde".

Por su parte, tanto los accesos a las capitales vascas como el tráfico de largo recorrido han registrado un aumento del 0,25% respecto a 2023.

La directora de Tráfico del Gobierno vasco, Estibaliz Olabarri, ha valorado que "lo más destacable es que no se han registrado víctimas mortales durante esta Semana Santa en Euskadi". Pese al ligero aumento de los desplazamientos, ha explicado, "se han producido menos accidentes y ninguno de ellos ha provocado fallecimientos". "Esto es algo que nos reafirma en la idea de seguir trabajando con una visión cero víctimas en la red viaria vasca", ha apuntado.

En función de los datos que ha aportado, entre el 27 de marzo y el 1 de abril, se han registrado 51 accidentes, 17 de ellos con víctimas, que han dejado una persona herida de gravedad. Esto supone un descenso de la accidentalidad del 43% en comparación con 2023, cuando se produjeron 89 accidentes, con una persona fallecida y cinco heridas graves.   

PUNTOS CRÍTICOS

Por otro lado, como es habitual, los mayores flujos de tráfico en Semana Santa se han registrado en Bizkaia, en la mañana del Jueves Santo, 28 de marzo, en la A-8, entre Portugalete y Muskiz, sentido Cantabria, con retenciones de hasta 11 km.

En cambio, durante la Operación Retorno, el Lunes de Pascua, 1 de abril, no se registraron las habituales retenciones de Cantabria hacia Bilbao, ya que "la climatología originó un regreso escalonado" entre el domingo y el lunes. Además, no se produjeron accidentes, lo que contribuyó a mantener la fluidez del tráfico, ha explicado Tráfico.

En Gipuzkoa, en Jueves Santo se registraron colas de hasta 6 km en la AP-8, sentido Baiona, en el Peaje de Biriatou, y de hasta 2 km en el Peaje de Zarautz. Por otra parte, el miércoles por la tarde el incendio de un vehículo en la AP-8, a la altura de Elgoibar, sentido Bilbao, originó retenciones de 3 km.

En la madrugada del Lunes de Pascua, el retorno "masivo" de los espectadores del partido de rugby en San Sebastián la noche del domingo dejó colas de hasta 5 km en el Peaje de Biriatou, sentido Baiona.

En Araba, en la Operación Salida, se registraron las retenciones habituales (de hasta 5 km) el miércoles por la tarde y el Jueves Santo por la mañana, en el Nudo de Armiñón, en el enlace de la A-1 con la AP-1, sentido Burgos-Madrid.

En la Operación Retorno, el Lunes de Pascua no hubo retenciones en este punto, según ha explicado Tráfico, gracias a la operativa dispuesta por el Gobierno Vasco, en coordinación con la Diputación Foral de Álava, en el enlace de la AP-1 con la A-1, en el Nudo de Armiñón, sentido Vitoria-Gasteiz.

Por otra parte, debido a que el Lunes de Pascua también es festivo en Francia, el pasado martes, 2 de abril, en el paso fronterizo se produjeron retenciones de vehículos pesados de hasta 9 km.