El incendió que se desató este jueves, hacia las 17.30 de la tarde, en un edificio de viviendas de Valencia se ha cobrado la vida de, al menos, cuatro personas.
Se teme que la cifra de fallecidos se eleve una vez los bomberos puedan acceder al inmueble, devastado por la virulencia de las llamas. Y es que actualmente, según ha dado a conocer la alcaldesa de Valencia, entre 9 y 15 personas siguen sin ser localizadas y se ha instalado un equipo psicosocial para atender a los familiares de los desaparecidos.
María José Catalá ha detallado que la cifra de muertos no ha sido actualizada debido a que los bomberos desplazados a la zona no han podido entrar en el inmueble.
Lo harán una vez se garantice la seguridad de la estructura y se estudie la manera de poder acceder a este sin comprometer sus vidas.
Afectados
Además, la primer edil ha subrayado que se ha instalado un punto de atención dirigido expresamente a las personas desplazadas, aquellas que "lo han perdido todo y que han pasado la noche en un hotel, habilitado por el Ayuntamiento, o en casas de familiares".
Concretamente, un total de 36 personas han sido alojadas en hoteles, donde "podrán seguir durante la próxima semana".
Catalá ha asegurado, además, que mientras dichas personas permanecen en alojamientos temporales, desde el Consistorio y la Generalitat se están afanando en estudiar medidas y soluciones para los afectados de cara a los próximos meses.
"No queremos que tengan ni un minuto de incertidumbre en los próximos meses", ha enfatizado.
Por último, la alcaldesa de la ciudad ha dedicado unas palabras de agradecimiento a "las empresas valencianas y a quienes facilitaron los primeros recursos". También ha remarcado que Valencia ha decretado tres días de luto oficial, quedando suspendidos los actos oficiales que estaban programados el fin de semana.
"Estamos centrados en acompañar en el duelo y en las necesidades de quienes han perdido todo. Estamos volcados en esto", ha insistido Catalá.
Seis ingresados: "Su vida no corre peligro"
Como consecuencia de la virulencia de las llamas y la densa nube de humo, quince personas fueron hospitalizadas este jueves por la tarde. De ellas, siete fueron bomberos.
Para el presidente de la Generalitat Valenciana estas cifras son "muestra del esfuerzo" que realizaron quienes acudieron en un primer momento hasta el lugar para prestar asistencia.
La buena noticia, según ha informado Carlos Mazón, es que "afortunadamente su vida no corre peligro". Tras señalar la "labor encomiable" realizada por los profesionales, Mazón ha precisado que de las quince hospitalizados inicialmente; tan solo seis continúan ingresadas, cinco de ellas bomberos.
"La mayoría de ellos se encuentran ingresados por quemaduras, aunque no se teme por su vida", ha ahondado el presidente de la comunidad valenciana.
En lo que respecta a la asistencia de los vecinos del inmueble, desde la Generalitat trabajan ya en el diseño de un decreto con "medidas económicas para la restitución de las viviendas, enseres, así como las necesidades que puedan ir surgiendo", ha avanzado Mazón.
Un incendio devastador
Un fulminante y devastador incendio en un edificio de viviendas de catorce plantas en Valencia, que se ha propagado a otro anexo, ha causado este jueves cuatro muertos y se busca a otras diecinueve personas que están desaparecidas y a quienes sus familiares no han logrado localizar desde que comenzó el fuego.
El siniestro comenzó sobre las cinco y media de la tarde en un inmueble que terminó de construirse en 2009 en la esquina de las calles General Avilés con Maestro Rodrigo, una zona de viviendas de nueva construcción en un barrio, el de Nou Campanar, de grandes avenidas y zonas comerciales y de ocio, al noroeste de la ciudad.
Por el momento se desconoce el origen del incendio aunque los bomberos apuntan que comenzó en la quinta planta y se propagó rápidamente a las plantas superiores; en apenas media hora prácticamente todo el edificio estaba en llamas o sumido en una densa humareda.
Un infierno en pocos minutos
El fuego, avivado además por las fuertes rachas de viento de hasta 60 km/h, se propagó rápidamente al edificio anexo, que forma parte del mismo bloque de 138 viviendas, con zonas comerciales en sus bajos.
Además, los bomberos consiguieron rescatar a dos personas que se habían quedado atrapadas en un balcón, cercado por las llamas. Fueron auxiliados mediante una grúa y, una vez consiguieron descender, fueron recibidos entre aplausos de cientos de personas que se fueron congregando en las inmediaciones.
Fachada de poliuretano
Testigos del incendio señalaron que las llamas prendieron "muy rápido" en muy poco tiempo, formándose "una nube de humo brutal, haciéndose prácticamente de noche".
El incendio de este edificio de fachada ventilada y revestimiento de poliuretano podría suponer "un antes y un después" en el Estado, donde hasta ahora no se había producido ningún suceso similar. No obstante, sí hay antecedentes de incendios de esta índole en Londres o en China, según ha señalado la vicesecretaria del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Valéncia y experta en peritaje de siniestros e incendios.
Esther Puchades ha aclarado que aunque el uso de poliuretano no está prohibido en la construcción, dada la virulencia de este incendio se podría replantear su uso.
Los mensajes de solidaridad con Valencia han sido numerosos en las redes sociales. Los reyes han expresado que siguen con preocupación la evolución del incendio y han trasladado sus mejores deseos a los heridos, mientras el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha mostrado su consternación por el suceso y ha ofrecido a Mazón y a Catalá "toda la ayuda que sea necesaria".
Asimismo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha trasladado su "apoyo y confianza" en los bomberos, en los Cuerpos de Seguridad del Estado y "en cada uno de los profesionales que se están incorporando para ayudar".
