El Servicio vasco de Mediación Familiar aumentó su actividad en 2023 al atender a 16.140 personas, un 11,3 % más que el año precedente, y la mayoría de casos, un 86,7 %, fueron por temas derivados de rupturas de pareja.

El Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno vasco ha informado este domingo de la actividad de este servicio gratuito, que está disponible para cualquier familia residente en Euskadi que quiera resolver un conflicto familiar fuera del ámbito judicial.

Este servicio ofrece información jurídica, psicológica y social en el contexto de la mediación. También es un espacio neutral para dialogar sobre la situación familiar o de pareja.

"Se favorece que las partes puedan responsabilizarse en la gestión de sus propios conflictos, buscando además el consenso y resolviendo las divergencias y controversias de manera negociada y pacífica. Las principales herramientas, creadoras de un diálogo cooperativo, son la palabra y los procesos de reflexión compartida", ha destacado la viceconsejera de Políticas Sociales, Lide Amilibia.

Tendencia al alza

Las 16.140 personas atendidas forman parte de 2.447 familias, un 10 % más. De ellas, 856 participaron en premediaciones, 1.008 en mediaciones y 583 fueron seguimientos de casos ya iniciados.

Tras un primer contacto, en caso de que se muestre un interés comienza una fase de premediación hasta que se firma un documento de compromiso.

En el proceso de mediación propiamente dicho las familias o parejas en conflicto se reúnen con un mediador en diferentes sesiones en las que trabajan sus puntos de vista y los contrastan para tratar de resolver el problema y acordar qué va a aportar cada parte para resolver la situación.

8 de cada 10 casos acaban en acuerdo

En 2023, se mantuvo un alto porcentaje de procesos de mediación finalizados con acuerdos, el 82,3 %. El servicio incluye además una fase de seguimiento del acuerdo firmado por las partes, que suele llevarse a cabo pasado un año para que si deciden que el pacto ha quedado obsoleto o no se corresponde con sus necesidades puedan modificarlo o incluso iniciar un nuevo proceso de mediación.

En el servicio de atención telefónica, la mayoría de las personas que llamaron fueron mujeres, el 67,3 %, aunque se observa un incremento en el número de hombres.

También fueron más las mujeres, el 57,6 %, las que solicitaron la mediación.

En total se llevaron a cabo 21.367 intervenciones, un 17,2 % más que en 2022, de las que 12.502 fueron en Bizkaia, 5.411 en Gipuzkoa y 3.454 en Araba.