Euskadi tenía 69.952 viviendas vacías en 2021, lo que supone un 25,4 % menos que 20 años antes, en 2001, según un estudio elaborado por la tasadora Tinsa.

Esta reducción de viviendas vacías en Euskadi es la segunda mayor de todas las CCAA, solo por detrás de la Comunidad de Madrid, cuya reducción ha sido del 38,4 %, y contrasta con el incremento medio nacional del 24,1 % en las últimas dos décadas hasta sumar 3,8 millones de viviendas vacías en 2021.

Además Euskadi presenta una de las menores cuotas de viviendas vacías respecto a su parque residencial, del 6,5%.

En Euskadi de las 69.952 pisos y casas vacías, la mayoría, 34.118, se sitúan en Bizkaia, cuya reducción en los últimos años ha alcanzado el 30,3 %. En Gipuzkoa son 11.762 las viviendas vacías  (-28 %) y en Araba 11.072.

En Euskadi la reducción de viviendas vacías se ha producido sobre todo en el interior de cada territorio y algo menos en las capitales, mientras que en el conjunto de España se ha dado un fenómeno diferente: frente al aumento en el conjunto del territorio nacional en las capitales se han reducido un 32 %, una caída que ha llegado al 40 % en las seis principales: Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Sevilla y Málaga.

En la CAV las viviendas vacías suponen el 6,5 % del total, es decir cuatro puntos menos que hace 20 años, cuando representaban el 10,5 % del parque de viviendas, la cifra más baja de todas las autonomías.

En todo el Estado español las viviendas vacías representan un 14,4 % del parque residencial.

Por volumen, la vivienda vacía se ubica principalmente en Madrid y Barcelona, ya que ambas tienen la mayor densidad de población, seguidas de las provincias costeras del Mediterráneo, los dos archipiélagos, Galicia y Asturias.

Las mayores cuotas sobre el total de viviendas se dan en provincias del interior y noroeste peninsular. En las de Orense y Lugo suponen un 43,7 % y 37,3 % de su parque, seguidas de siete provincias de interior con entre un 25 % y 30 % en Castilla La Mancha, Castilla y León y Aragón.

En el extremo opuesto, las menores cuotas de vivienda vacías se dan en Bizkaia, Madrid, Araba, Gipuzkoa, Barcelona y Valladolid (entre el 6 % y el 10 %).

Tinsa señala como principales causas de estos datos la despoblación en el interior y noroeste peninsular, la obsolescencia de la oferta construida y los extensos plazos en la tramitación para su puesta en el mercado. Este desajuste entre demanda y oferta está provocando tensiones en los precios.

Además, considera que la capacidad para solucionar el problema actual de acceso a la vivienda en esas zonas es limitada ya que habitualmente estas casas presentan condiciones de inhabitabilidad, procesos jurídicos asociados o sus propietarios las mantienen fuera del mercado.

La tasadora propone aumentar la oferta en las ubicaciones más tensionadas apoyándose en la colaboración público-privada; mantener la seguridad jurídica y el derecho a la propiedad privada; replantear el modelo de ciudad y potenciar un modelo de crecimiento territorial distribuido en capitales secundarias que no concentre excesivamente la población en un reducido número de capitales.