- La forma sospechosa en la que un supuesto empresario retiraba dinero durante una hora todos los días en un cajero automático permitió desarrollar una operación de la Policía Nacional con 125 detenidos por un fraude con epicentro en Elche, pero extendido a todo el Estado, para defraudar en la regularización de migrantes y a la Seguridad Social, usando para ellos criptomonedas.
Según la policía, la organización llegó a operar con una treintena de empresas a las que asignaba testaferros y que servían para ocultar un entramado para regularizar migrantes y defraudar a la Seguridad Social, todo ello teniendo como domicilio social a un prostíbulo que resultó ser propiedad del considerado como cabecilla.
Se han practicado 12 registros domiciliarios en los que se han intervenido 124.000 euros en efectivo, cuatro vehículos de alta gama, cinco equipos informáticos, una granja de minado de criptomonedas y 112.000 euros en monedas virtuales que la trama empresarial utilizaba para blanquear los beneficios obtenidos de su actividad ilícita. Las empresas ficticias facilitaban a los migrantes tanto documentación como contratos y ofertas de trabajo, a cambio de una deuda de entre 3.000 y 6.000 euros.