- El director de Migraciones y Asilo, Xabier Lejarreta, señaló que el Gobierno Vasco ha recibido a través de la dirección errefuxiatuak@euskadi.eus 3.000 solicitudes para acoger niños y ofrecer viviendas para los refugiados de Ucrania.

En una entrevista en Onda Vasca, Lejarreta no dudó de la “buena voluntad” de quienes viajan a la frontera de Polonia para trasladar a refugiados a Euskadi pero pidió que acudan a los cauces oficiales y vayan de la mano de las entidades que tienen experiencia en crisis humanitarias.

En este sentido, señaló que llegan informaciones de que en Polonia se están empezando a identificar a mafias que “hacen negocio de este drama”. “Están preocupados con posibles problemas que pueden surgir con la trata de mujeres solas que se encuentran en momentos de vulnerabilidad y con niñas que llegan huérfanas y que son carne de cañón para estas mafias”, explicó.

Esta semana se articularán procedimientos para que puedan solicitar la protección internacional y acceder a una “cartera de derechos como el resto de ciudadanía”.

Respecto a los niños de la zona de Chernóbil acogidos cada verano en Euskadi, Lejarreta manifestó que son unos 200 que viven en aldeas, en una zona en la que no hay corredores humanitarios, algunas están sin luz y agua y las familias vascas están empezando a perder el contacto con ellas, por lo que la “preocupación va creciendo”.

Precisamente, las cuatro asociaciones de acogida de niños de Chernóbil que operan en Euskadi se reunieron ayer con la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal.

Durante el encuentro la consejera explicó que, a fecha del 13 de marzo, los recursos organizados por las instituciones y asociaciones como Cruz Roja, CEAR y Zehar Errefuxiatuekin están atendiendo en Euskadi a 262 personas procedentes de Ucrania.

El Gobierno Vasco puso a disposición de CEAR, entidad que gestiona el sistema estatal de acogida, 90 plazas del albergue Fundación Santa María de la Diputación de Araba y otras 150 en el albergue de Hondarribia que gestiona la Diputación de Gipuzkoa, unos recursos que aún no han sido ocupados.

El Departamento de Artolazabal asegura que por el momento es imposible tener “datos fiables” de los acogidos directamente por la diáspora ucraniana en Euskadi o por iniciativas individuales y colectivas.

En relación a los niños de Chernóbil, la solicitud al Gobierno para que impulse este corredor humanitario ya fue formulada el pasado domingo por el lehendakari, Iñigo Urkullu, en la Conferencia de Presidentes.

La consejera explicó que, según la información que manejan las asociaciones, la situación de estos niños es “insostenible desde hace unos días”. “Son niños y niñas que padecen ya situaciones comprometidas de salud, de maduración y de desarrollo. Las familias vascas han visto crecer a estos menores y los sienten como miembros de sus familias”, señaló Artolazabal.

Reconoció que las últimas noticias que tienen de estos niños son de hace diez días, cuando las comunicaciones se cortaron, lo que “puede ser una estrategia del Ejército ruso de aislarles” para que no informen de su situación. Hace diez días, relató, estos niños estaban en los sótanos de sus casas en condiciones “muy precarias”, sin luz, sin agua, sin calefacción y “sobreviviendo de mala manera”.

Los representantes de las asociaciones Chernobileko Umeak, Chernobil Elkartea, Chernobilen Lagunak y Ukrania Gaztea leyeron una declaración en la que reclaman la salida de los niños que han acogido, junto con sus hermanos y madres.

Proponen una evacuación segura a Polonia u otro Estado de la UE para que, “siempre de acuerdo con su deseo”, sean trasladados a Euskadi. “Se trataría de un procedimiento coherente con el principio de reagrupación familiar, organizado y con garantías para las personas menores de edad y sus familias, para el que mostramos nuestra total disposición a colaborar”, señalaron.

“Las familias vascas han visto crecer a estos niños y los sienten como miembros de sus familias”

Consejera de Asuntos Sociales