La avalancha de gripes, resfriados, catarros y por supuesto coronavirus obliga al Servicio vasco de Salud a la realización de miles y miles de pruebas PCR diarias para separar el trigo de la paja. La vuelta de los virus respiratorios tradicionales complica la identificación del covid frente a otras patologías. Porque este segundo invierno de pandemia ha configurado un nuevo escenario en el que los virus tradicionales comparten protagonismo con el coronavirus. Como apunta el doctor Julio Maset, "en realidad, solo se trata de una vuelta a la normalidad de siempre, en la que la mayor parte de infecciones están causadas por virus habituales de esta época, como los del resfriado o la gripe. Durante el otoño e invierno pasados, precauciones como el uso de la mascarilla, la distancia social o la reducción de aforos en interiores relegaron al mínimo estas patologías, que ahora vuelven a reclamar su espacio".

Para el experto de Cinfa, "la bajísima incidencia de estas patologías que hubo en 2020 está produciendo un efecto de fallo de memoria. Es decir, tras un año y medio sin que apenas hayan hecho acto de presencia, no nos acordábamos de que estas infecciones forman parte de nuestra realidad cotidiana. Pero ¿cómo saber si es catarro, gripe o covid-19? Hacer un buen diagnóstico a partir de los síntomas no siempre es posible, por eso la forma más fiable son las pruebas, como los test de antígenos o las PCR.

Y es que la dificultad de diferenciar si se trata de un simple resfriado o la infección por Sars-Cov-2, puede generar una alarma innecesaria. "Para evitarlo, debemos actuar con sentido común y no acudir de manera sistemática a los centros de salud, para evitar que estos se saturen. En algunos casos, los síntomas serán los que nos den la pista de qué virus los ha generado, aunque, en otros, solamente un test nos dará la respuesta definitiva", señala.

A la hora de diferenciar las tres afecciones, es importante conocer sus principales síntomas, si bien se debe tener en cuenta que la vacunación contra el covid-19 ha hecho que muchos casos sean leves y con sintomatología muy similar. En general, los resfriados comunes normalmente se caracterizan por los típicos estornudos, algo de tos, mucha mucosidad, congestión nasal con moco fluido, picor de garganta y ojos llorosos. Aunque también hay malestar, el cansancio suele ser leve o moderado y la fiebre es inusual o baja. "Si en este caso, aparecen también tos persistente, dolor de cabeza o fiebre algo más alta, no necesariamente se trata de covid-19 o gripe, pero sí es útil realizar una prueba que nos proporcionará algunas respuestas", asegura Julio Maset. "Si es positivo, deberemos aislarnos y contactar con los servicios sanitarios".

La gripe, en cambio, suele cursar con síntomas como fiebre alta, dolor muscular y de cabeza, cansancio intenso, debilidad y malestar general, muchos de los cuales son también característicos del covid-19. Por este motivo, "sin pruebas adicionales, la gripe es prácticamente imposible de distinguir de la infección por covid-19. En este caso, la única manera de descartarla es con un test". Si aparece fiebre alta, fatiga al respirar o dolor torácico, se debe acudir sin falta al médico.

complicación en las aulas

En las aulas, el covid ha complicado tremendamente la situación -el viernes se acercaban a 400 las clases clausuradas- pero tampoco han escaseado otras patologías respiratorias. "La vuelta al cole y la bajada de las temperaturas hacen que las infecciones virales se hayan disparado, siendo las patologías más frecuentes la fiebre sin foco, la nasofaringitis, la bronquiolitis aguda o la gastroenteritis aguda", apunta el doctor Antonio Conejo, pediatra.

El facultativo aclara que las patologías más prevalentes son con diferencia las infecciones respiratorias, como la bronquitis, bronquiolitis, catarros, faringitis y laringitis. En este sentido, precisa que este año, por primera vez, el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, recomienda la vacunación universal frente a la gripe para todos los menores de entre 6 y 59 meses y no solo a los pacientes con factores de riesgo.

La fiebre sin foco es una de las enfermedades virales más frecuentes en esta etapa y es común a prácticamente todas las infecciones. Para el doctor Conejo, lo único que se puede hacer es controlar los síntomas, con la medicación habitual, paracetamol o ibuprofeno. Por otro lado, se encuentra la nasofaringitis aguda (catarro en vías altas), que se trata de la patología más frecuente durante el curso escolar y que se manifiesta con tos, foco y fiebre.

Con respecto al covid-19, en niños sintomáticos suele causar un cuadro leve indistinguible de cualquier catarro. "En las condiciones epidemiológicas actuales, aunque las cifras de incidencia se han descontrolado, hay un elevado porcentaje de mayores de 12 años ya vacunados", puntualiza.

En cuanto a la bronquiolitis aguda, se trata del primer episodio de dificultad respiratoria en un niño menor de 2 años y está causada por multitud de virus, el más frecuente el respiratorio sincitial, conocido como VRS. El tratamiento es similar a los anteriores con lavados nasales y posición incorporada.

Cómo lidiar con los virus

Test antígenos

Despejar dudas. Si hay mucosidad, estornudos y ausencia de fiebre, se trata probablemente de un resfriado común, pero, si aparecen fiebre baja, dolor de cabeza y tos persistente, recurre a un test de antígenos.

Fiebre

Médico. En caso de fiebre superior a 38º, fatiga al respirar o dolor o sensación de opresión en el pecho, consulta al médico. Si es positivo, aíslate y contacta con Osakidetza.

Mascarillas

Interiores Usa mascarilla en interiores. No es solo útil para protegerse contra el covid-19, sino también evita gripes y resfriados. Lávate las manos con frecuencia y ventila los espacios.

Ojo con el frío

Humedad. Huye de ambientes fríos, húmedos o con humo. Dado que estos virus prefieren las bajas temperaturas, evita la exposición al frío, así como los cambios de temperatura.

Dieta y bebidas

Vitaminas. Incorpora vitaminas y minerales en tu dieta. Bebe líquido con frecuencia. Agua, zumos y sopas no muy calientes ayudan a eliminar la mucosidad, previenen la deshidratación y alivian el dolor de garganta.

Infección. Los síntomas de estas infecciones respiratorias pueden aliviarse con reposo, una correcta hidratación y los medicamentos adecuados. "Lo más importante es tratar los síntomas y frenar la propagación de la infección. Para ello, no debemos relegar al olvido hábitos que han formado parte de nuestro día a día desde la llegada de la pandemia, como lavarnos las manos con frecuencia. Y, en caso de resfriado, hay que usar la mascarilla por incómoda que sea, con otras personas".