El concejal y presidente de Cementerios de Barcelona, Eloi Badia, ha advertido de que el servicio de incineraciones de la ciudad puede entrar en "colapso" a partir de este miércoles por el aumento de peticiones.

Lo ha dicho este lunes en una rueda de prensa para actualizar la situación de los servicios funerarios de la ciudad, en la que ha dicho que se ha detectado un aumento "muy importante" de la petición de cremaciones.

"Antes de la crisis del Covid-19, las inhumaciones representaban el 46% y las cremaciones el 54%. Ahora tenemos picos del 78% de cremaciones. No podemos dar servicio a todos", y ha advertido de que deberán derivar peticiones de cremación a inhumaciones.

El Ayuntamiento de Barcelona plantea que a partir del próximo miércoles se incinere a los difuntos que ya estén a la espera de cremación en depósitos funerarios y los que vayan llegando sean inhumados provisionalmente e incinerados pasados dos años sin coste añadido para garantizar el servicio.

Las empresas funerarias comunicarán a las familias si pueden incinerar a la personas muerta y les ofrecerán un entierro definitivo o uno provisional, y, en éste último caso, una vez pase la crisis del coronavirus, las familias podrán solicitar una cremación sin ningún coste añadido.

Badia ha precisado que la ciudad enterró la semana pasada a unas 200 personas, unas cuatro veces la cifra habitual, si bien en esta cifra se cuenta no solo a los fallecidos en Barcelona, sino también a gente que murió en otros municipios del área metropolitana.

Ha explicado que la ciudad está preparada para asumir 80 cremaciones y 150 inhumaciones al día; que las cremaciones se producen en un período de entre una semana y 10 días a partir de la defunción, y que las peticiones de éstas han aumentado hasta las 150 al día.

Ha señalado que, si sigue este nivel de demanda, se cerrará la lista de espera de las incineraciones y se derivarán a inhumaciones, servicio que también prevén reforzar y que podría llegar a "no permitir la presencia de familiares", como ya pasa en las cremaciones.

ENTIERROS QUE NO SUPEREN LOS 2.500 EUROS

También ha anunciado que el Ayuntamiento ha recibido la confirmación de la Generalitat para que el precio de los servicios funerarios y la incineración o inhumación en la ciudad no superen los 2.500 euros.

Las funerarias serán también las que sostengan el aumento de depósitos, "un esfuerzo importante con tal de poder descongestionar los hospitales", ha valorado Badia, que ha anunciado que está previsto ampliar la capacidad de los depósitos con 200 o 300 plazas.

QUINTO CREMATORIO EN 10 DIAS

Badia ha anunciado que en "unos diez días" prevén tener en funcionamiento un quinto crematorio en la ciudad, que podría realizar entre 10 y 12 servicios diarios, y que se suma a los cuatro crematorios que tiene la ciudad.

Estos cuatro crematorios, localizados en el cementerio de Montjuïc realizan 56 servicios al día, aunque, si se tienen en cuenta las incineraciones que hacen las funerarias en otras ciudades de Barcelona, los servicios se estiman entre 80 y 90.

Preguntado por el crematorio del cementerio de Collserola, que se mantiene cerrado, ha explicado que "era mucho más económico, rápido y eficaz ampliar los crematorios de Montjuïc que no poner al día el de Collserola", puesto que se tenía que licitar las obras este abril y los trámites se hubieran dilatado en el tiempo.

Respecto a los entierros de la comunidad musulmana, ha asegurado que los cementerios de Barcelona tienen instalaciones preparadas para ello, aunque hay servicios que ya no se pueden prestar, como la manipulación de cadáveres.