- El presidente de EEUU, Donald Trump, dijo ayer que se reserva la opción de extender más de 30 días su veto a los viajes desde Europa y también la de acortar ese plazo si "acaban" los problemas derivados del coronavirus.

"Por supuesto, es posible (que lo extienda más de 30 días), y también es posible que lo anulemos antes de lo previsto", dijo Trump al ser preguntado al respecto durante una reunión en el Despacho Oval con el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, cuyo país no está afectado por el veto.

"Creo que restableceremos (los viajes desde Europa) bastante rápidamente una vez que esto acabe", añadió el mandatario.

Trump afirmó que su Gobierno podría eliminar "bastante pronto" la prohibición de entrada en EEUU a los extranjeros que hayan visitado China en los últimos 14 días, porque ese país "ha hecho muchos avances en las últimas pocas semanas".

"Y esperamos que con Europa también podamos hacerlo muy rápidamente", agregó Trump, quien subrayó que la incidencia del coronavirus en Italia "probablemente ha batido récords" y que también hay problemas en Alemania y Francia.

Trump ordenó el miércoles un veto a los viajes a EEUU desde los 26 países que pertenecen al espacio europeo Schengen de libre circulación, incluido España, con el fin de prevenir la propagación del coronavirus.

La suspensión entrará en efecto la medianoche del viernes al sábado, y aunque Trump dijo en su discurso que duraría 30 días, la orden escrita que firmó, divulgada después por la Casa Blanca, no menciona ese periodo y señala únicamente que la restricción finalizará cuando el mandatario así lo decida.

Los presidentes de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, y del Consejo Europeo, Charles Michel, deploraron ayer la decisión de Trump sobre los viajes, y lamentaron que la tomara "sin consultas" con los líderes europeos.

Preguntado por el tema, Trump replicó que "lleva mucho tiempo llamar individualmente" a tantos dirigentes, y que no quería "perder el tiempo" en eso.

"Cuando ellos (la Unión Europea) nos suben los impuestos, no nos consultan, y creo que esto es probablemente una situación similar", zanjó el mandatario.

"Esto es solo una cuestión de tiempo, yo creo que todo irá muy rápidamente (...) Pero tenemos que tener una separación" respecto a los lugares con más casos de coronavirus, subrayó.

Ante la pregunta de si un estadounidense que viaje desde Europa no podría estar también contagiado de coronavirus -dado que los ciudadanos del país, sus familias y quienes tienen visados diplomáticos están exentos del veto-, Trump respondió que a esa persona se la sometería a "pruebas" y a una "cuarentena" si hace falta.

En su discurso del miércoles, Trump tildó el COVID-19 de "virus extranjero" y culpó a Europa de parte de su propagación en EEUU, al afirmar que la UE "no tomó las mismas precauciones" que Washington y no restringió los viajes desde China", a pesar de que Italia prohibió los vuelos directos desde ese país el 31 de enero.

Ayer, Trump dijo que el coronavirus es "un gran problema global", pero insistió en destacar la relativa buena situación de Estados Unidos, donde hay más de 1.200 casos y al menos 36 muertes.

"La UE desaprueba el hecho de que Estados Unidos haya decidido imponer una prohibición a los viajes de manera unilateral y sin consulta previa", sostuvo en un comunicado conjunto la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

Asimismo, recordaron que la crisis por la pandemia del coronavirus es global y "no se limita a un continente". Por ello, subrayaron que ante la gestión de esta crisis se necesita la cooperación entre instituciones y no de acciones unilaterales.

En una rueda de prensa en Bruselas, el portavoz principal de la Comisión, Eric Mamer, dijo que desconoce si ha habido contactos con la Administración estadounidense tras el veto de Trump e indicó que en este momento el Ejecutivo comunitario está centrado en analizar las consecuencias de la decisión de Washington, que podría afectar a los propios viajes que tenía prevista la Comisión.

Bruselas entiende que, ante la crisis sanitaria, las autoridades publicas deben dar un paso adelante y adoptar iniciativas que consideren "apropiadas", pero siempre en coordinación con otras autoridades. "Esto afecta a todos, no a un país o a un continente en particular. Por eso, lo relevante es que las medidas que tomamos tanto en la UE como fuera de ella, se adoptan en consulta y cooperación con otros actores para asegurar su efectividad", explicó el portavoz comunitario.

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, declaró ayer el estado de emergencia en la ciudad y adelantó que las medidas excepcionales que se están tomando para frenar el coronavirus podrían extenderse "durante un número de meses".

Entre otras acciones, el gobernador Cuomo decidió prohibir cualquier reunión o evento que congregue a más de 500 personas.

Merkel pide evitar contactos sociales. La canciller alemana, Angela Merkel, pidió ayer evitar "si es posible, los contactos sociales", como medida para evitar la propagación del coronavirus, una situación que calificó de "dinámica" y que adelantó provocará un impacto económico importante.

Venezuela cancela los vuelos provenientes de Europa. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció ayer la suspensión por un mes de todos los vuelos provenientes de Europa y de Colombia "para sumar a los procesos preventivos a nivel internacional" por el coronavirus que, según aseguró, no ha llegado aun al país.

El virus amenaza a Bolsonaro. El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, está bajo estricta vigilancia médica después de que el jefe de la Secretaría Especial de Comunicación de la Presidencia, Fabio Wajngarten, diese positivo.

100.000

El Gobierno de China informó ayer a través de su embajada en Madrid que ha enviado un lote de suministros médicos a Europa que incluye 1,8 millones de mascarillas y 100.000 test para realizar la prueba del COVID-19.

Irán pide el levantamiento de sanciones de EEUU. Irán denuncia ante la ONU que las sanciones estadounidenses están complicando al extremo la lucha contra el coronavirus en el país y reclamó su levantamiento "inmediato". "Mientras el virus hace estragos en nuestras ciudades y pueblos, nuestra población (...) sufre la campaña de terrorismo económico más severa e indiscriminada de la historia", señaló el ministro iraní de Exteriores, Javad Zarif.

Evita medidas drásticas. El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció ayer que su Gobierno ha pasado a la segunda fase de su plan contra la epidemia de Covid-19, que desde ahora tratará de "retrasar", en lugar de contener, aunque evita por el momento medidas drásticas como cerrar colegios y prohibir grandes eventos. Hasta ahora, se han detectado 596 contagios -134 nuevos ayer-, y diez muertes, si bien Johnson advirtió de que "el verdadero número de casos puede ser mayor, quizás mucho mayor, que el número de casos que hasta ahora se han confirmado". El consejero científico del Gobierno, Patrick Vallance, estimó que el número real de infectados en el país puede estar entre 5.000 y 10.000 personas. El primer ministro subrayó que la epidemia "se va a continuar extendiendo" y advirtió de que "muchas familias van a perder a sus seres queridos antes de tiempo" en la "peor crisis de salud pública en una generación".