BILBAO. Los hechos ocurrieron a las 19 horas de ayer, cuando el avión de la aerolínea británica ha aterrizado en el aeropuerto de Manises y la cabina se ha llenado de humo nada más tocar tierra por circunstancias desconocidas, según han informado fuentes de la Delegación de Gobierno en la Comunidad Valenciana
El incidente se ha comunicado a la torre de control. Aunque en un primer momento los servicios de emergencias han recibido la notificación de que se había detectado fuego en uno de los motores del avión al aterrizar, a la llegada de los efectivos de bomberos no había llamas, solo humo, ha detallado el 112. Se han abierto las puertas de emergencia y los pasajeros han salido de la aeronave a través de las rampas flotantes.
Como consecuencia del suceso, tres personas han resultado intoxicadas de carácter leve por humo y han sido trasladadas a centros hospitalarios para comprobar su estado de salud. Además, 16 pasajeros han sido asistidos por diferentes causas, como rozaduras al bajar de las rampas flotantes y ataques de ansiedad, según la Delegación del Gobierno.
Uno de los pasajeros del avión, el periodista Dani Meroño, ha relatado a través de Twitter que se han vivido momentos de "pánico" y "miedo". "Está todo el mundo bien pero ha habido gente que lo ha pasado francamente mal. El susto ha sido grande cuando ha aparecido la niebla mientras volábamos. Por suerte, ha sido cerca y ha ido todo bien. Cuando hemos aterrizado, hemos suspirado", ha explicado.
El aeropuerto no ha activado ninguna fase de emergencia, pero el tráfico aéreo se ha desviado alrededor de 25 minutos y después se ha restablecido.
Desde la compañía aérea, a través de redes sociales, se ha informado de la constancia de un incidente que afecta a una de sus aeronaves en Valencia y que informarán de lo sucedido tan pronto como dispongan de más datos.