madrid - Idoia Moreno, la enfermera española que coordina la clínica pediátrica que Médicos Sin Fronteras (MSF) tiene fuera del campo de refugiados de Moria, en Lesbos (Grecia), sostiene que la situación del recinto, en el que viven 9.000 personas “sólo se puede definir como un infierno”.

En un vídeo, esta enfermera relata que la situación es “totalmente inhumana”, ya que el campo de refugiados fue creado para acoger a 3.000 personas. “Hay una total falta de dignidad y acceso a la atención sanitaria de calidad”, afirma coincidiendo con el anuncio de las autoridades griegas de que van a evacuar este recinto. Según Moreno, las condiciones higiénicas son “totalmente insalubres”, pues existe un baño por cada 75 personas y una ducha por cada 85. Asimismo, señala que los niños no tienen “ningún tipo de acceso a la escuela ni a ningún centro sanitario”.

De hecho, asegura que la ONG para la que trabaja atiendie a menores con certificados médicos que indican que deben ser trasladados fuera de la isla. También hay mujeres embarazadas con VIH. “Como consecuencia de las terribles condiciones de vida, estamos viendo niños y adolescentes que han intentado suicidarse”, alerta esta sanitaria. - E.P.