VITORIA. El "spa" de la ciudad deportiva del Baskonia, Bakh, ha tenido que ser cerrado por un posible brote de legionela en sus instalaciones que por el momento ha afectado a cuatro personas, ha informado hoy el Ayuntamiento de Vitoria.
El Bakh reconoce que "algunos" de los afectados son socios del recinto pero recalca que el origen de la legionela "por el momento es desconocido" y que ni siquiera "desde los organismos públicos se tiene la certeza de dónde proviene".
Para determinar si el origen del brote está en las instalaciones del Baskonia se están efectuando diversos controles y análisis, pero su resultado tardará en conocerse al menos una semana, han explicado fuentes de este complejo deportivo.
La alarma saltó el miércoles de la pasada semana cuando el Departamento de Salud informó al consistorio de que había cuatro personas que estaban siendo tratadas en centros hospitalarios por neumonía debido a un posible brote de legionela y que las cuatro tenían un "nexo en común", que son usuarios habituales del "spa" del Bakh.
Ante este hecho, el consistorio se puso en contacto con el Bakh y le detalló las medidas que debía adoptar con carácter de "urgencia" hasta que se lleven a cabo todos los análisis pertinentes.
Así, se ha cerrado el "spa" y además los responsables de la ciudad deportiva del Baskonia deben desinfectar y limpiar ese espacio y toda la red de agua caliente y fría de las instalaciones.
También retirar las alcachofas de todas las duchas del centro, ya que la bacteria se trasmite por vía aérea a través de la pulverización del agua.
Asimismo se está procediendo a la hipercloración de los circuitos de agua, según han apuntado fuentes del Bakh.
Las piscinas están funcionando con normalidad y su uso es "totalmente seguro, de lo contrario (el complejo) estaría clausurado", han asegurado desde la ciudad deportiva del Baskonia, al tiempo que han recalcado que "las condiciones higiénico-sanitarias cumplen la normativa y son las adecuadas".
El Ayuntamiento ha señalado también que el Bakh está llevando a cabo las medidas reclamadas correctivas y cautelares indicadas y que ahora habrá que esperar a los resultados de los primeros análisis hechos.
El proceso se alargará en el tiempo porque una vez llevada a cabo toda la limpieza habrá que acometer una nueva recogida de muestras para constatar si han funcionado las medidas adoptadas y no hay restos de la bacteria.