Valencia - Los 630 inmigrantes del Aquarius que el pasado domingo desembarcaron en el puerto de Valencia firmaron la petición de asilo y cerca de la mitad manifestó su intención de trasladarse a Francia después de conocer que el Gobierno galo se haya ofrecido a acogerles. La mayor parte de los migrantes llegados a Valencia permanece en el complejo socioeducativo de Cheste, mientras que un centenar de menores de entre 12 y 17 años que llegaron en situación de “no acompañados” están alojados en un albergue de la ciudad de Alicante, adonde llegaron “cansados y contentos”.
La petición de asilo permite a todas estas personas, procedentes de una treintena de países, la mayoría africanos, acogerse al permiso de 45 días de entrada extraordinaria por razones humanitarias, según Ester Sanchis, miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Valencia.
Esta entidad ofreció 70 abogados del turno de oficio especializados en Extranjería para atender a los inmigrantes en el puerto, un asesoramiento que hizo en grupos de unas diez personas, y no a nivel individual, para “agilizar el proceso y que estas personas no sufrieran más de lo que han sufrido”.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, dijo que los migrantes del Aquarius recibirán atención “profesional y personalizada” y tendrán 45 días “para recuperarse física y anímicamente” y para que “puedan empezar su proyecto de vida aquí en Europa”. La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, informó por su parte de que casi la mitad de los migrantes llegados a Valencia en el operativo quiere ir a Francia, cuyo gobierno, de momento, parece que va a colaborar. Afirmó que el Estado dio “una imagen muy solvente” y que el Gobierno afrontó la situación con una “respuesta democrática y estricta” a una crisis humanitaria pero “obviamente” pone el tema en el debate europeo.
diez hospitalizados De los 630 migrantes llegados a la costa valenciana, 226 fueron atendidos por los servicios sanitarios en el puerto, entre ellos seis mujeres embarazadas y dos niños (uno de ellos acompañando a su madre), 122 fueron derivados a cinco centros hospitalarios de la ciudad de Valencia, y diez de ellos permanecen hospitalizados.
Según ha informado la consellera de Sanidad, Ana Barceló, los cuadros clínicos que presentaban las personas atendidas eran de deshidratación, fiebre, quemaduras por fuel y agua del mar, varios casos de amputaciones falángicas en las manos y mujeres en estado de gestación, una de ellas por un aborto que sufrió durante la travesía. A los 226 atendidos en el puerto se les facilitó ya en el lugar la tarjeta SIP, y al resto se les garantizará también la sanidad pública universal y podrán acudir a cualquier centro de salud público para ser atendidos. - Efe