Bilbao - ELA llevó a cabo ayer una concentración ante la sede del Servicio Vasco de Salud en Bilbao en protesta por las presuntas filtraciones en algunas pruebas médicas de la OPE de Osakidetza y exigió el cese del consejero de Sanidad, Jon Darpón, por su “falta de iniciativa” ante estos hechos. En el transcurso de la protesta, el responsable de negociación colectiva de ELA, Pello Igeregi, criticó la postura de Darpón ante “las evidencias de irregularidades” en la OPE y recordó también que la dirección de Osakidetza está obligada a abonar más de 100 millones a raíz de una sentencia sobre desarrollo profesional favorable a este sindicato.

“Mientras el Gobierno Vasco hace campaña con la OPE de Osakidetza, la situación del empleo en la sanidad pública de este país es cada vez más escandalosa y, en consecuencia, la calidad asistencial que se ofrece a la sociedad, es cada vez más precaria”, añadió. Asimismo, indicó que, además de ello, todo apunta a que el proceso selectivo de las categorías médicas “no ha sido lo transparente que debiera ni ha garantizado la igualdad de oportunidades que debe presidir estos procesos”.

Investigación rápida Por ello, ELA exigió una “investigación rápida, rigurosa e independiente” de lo sucedido en los exámenes, solicitó la suspensión del proceso selectivo de las categorías médicas y presentó una denuncia ante la Fiscalía del País Vasco en la que solicitan que investigue lo sucedido a fin de que “se depuren las correspondientes responsabilidades, tanto políticas, como penales”. Asimismo, el sindicato se ofreció una vez más para “plantar cara al lobby” formado por los jefes de servicio de varias especialidades médicas. “Lo ocurrido en muchos exámenes de esta OPE no ha sido un fenómeno aislado, sino una muestra más de un sistema corrupto, al frente del cual están varios jefes de servicio”, agregó. El sindicato rechazó el mensaje de la dirección de Osakidetza de que esta OPE “va a dar paso a un escenario poco menos que idílico” cuando, a su juicio, no va a suponer el fin de la actual “precariedad”.

Según apuntó, la finalización de esta OPE, la temporalidad en Osakidetza rondará el 38% y ha recordado que Osakidetza tiene, a día de hoy, más de 15.000 trabajadores temporales. “Así, mientras se vanagloria de haber convocado la OPE más masiva de los últimos tiempos, una OPE en la que se convocan 3.335 plazas, alrededor de 4.000 plazas quedarán vacantes por jubilación por lo que, a la finalización de este proceso, seguirá habiendo más de 16.000 trabajadores temporales”, manifestaron. - E. Press