MADRID. Todos los días al menos una mujer se ve obligada a dejar su puesto de trabajo por sufrir violencia de género, ha denunciado el sindicato CSIF, que ha presentado hoy un proyecto para detectar posibles víctimas de maltrato en el ámbito laboral con el apoyo de delegados sindicales especializados.

Según ha explicado hoy la secretaria de Igualdad del sindicato, Marian Mur, en cinco años se han computado 1.348 contratos de sustitución de mujeres víctimas de maltrato, "que sólo son la punta del icebert" de los miles de casos de trabajadoras que sufren maltrato y que no se visibilizan.

En este sentido, ha lamentado que no haya estadísticas de mujeres maltratadas en el ámbito laboral que ayudarían a visibilizar y actuar contra estas situaciones, ni de cuántas víctimas han tenido que pedir traslado de su centro de trabajo o reducir jornada por ese motivo, por lo que la responsable de CSIF ha defendido la urgencia de que exista ese apoyo y orientación para la trabajadora afectada al menos a través de ese delegado sindical.

"Mi jefa me despidió cuando le dije que mi novio me estaba vigilando y controlando cuando iba y volvía del trabajo", ha explicado Jessica Pagón, quien ha conseguido rehacer su vida gracias al apoyo de la Asociación Ilicitana contra la Violencia de Género (AIVIG).

Durante el encuentro informativo, varias víctimas de maltrato han explicado sus historias personales y han reclamado mayor formación sobre violencia de género para los profesionales que intervienen en sus procesos de denuncia, un paso que han definido como complicado si no se acompaña a la víctima.