Vitoria- En el año 2000 morían en Euskadi 2018 personas. Un a cifra escalofriante. Afortunadamente, diecisiete años después la situación es bien distinta: 39 personas, es decir, una caída superior al 80%, aunque como la directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera, advirtió ayer “no por ello tenemos que relajarnos y caer en la autocomplacencia”.

Otro análisis de los datos provisionales de 2017 (todavía faltan dos días) indican que de las 39 personas fallecidas (28 hombres y 11 mujeres), 23 eran conductoras (7 de moto y 16 de turismo u otro vehículo), nueve ocupantes y siete viandantes. Por territorios, vuelve a destacar un año más Gipuzkoa con 22 personas fallecidas, 9 en Araba y 8 en Bizkaia.

En cuanto a los accidentes, a fecha de 27 de diciembre, se han registrado en Euskadi 7.547 accidentes, mientras que en 2016 se cerró el año con 8.125 accidentes. Díaz de Corcuera también llamó la atención sobre “un dato que debería hacernos reflexionar y es que el porcentaje de personas fallecidas que no llevaba abrochado el cinturón de seguridad, teniendo que llevarlo, ha sido del 20,8 %. Un gesto tan sencillo -asegurarnos antes de poner en marcha el vehículo- puede salvarnos la vida”. Asimismo, incidió en que el uso indebido del teléfono móvil aumenta hasta un 23% el riesgo de padecer accidentes de tráfico y advirtió de que en 2018 se “insistirá en el mensaje” ya que las distracciones, el alcohol y la velocidad aparecen en un “porcentaje alto de los siniestros”.

Respecto al año pasado, en 2017 ha habido menos conductores y peatones fallecidos, pero ha aumentado el número de personas ocupantes de vehículo que han perdido la vida -fueron 5 el año pasado y 9 este año-. En cuanto al tipo de vehículo que conducían las personas fallecidas en accidente, este año no ha muerto ningún ciclista -aunque 77 resultaron con heridas de gravedad- y también ha descendido el número de motoristas fallecidos (11 en 2016 y 7 en 2017). Estos datos se refieren a accidentes registrados tanto por la Ertzaintza como por las policías locales, por lo que se incluyen los siniestros mortales ocurridos en vías urbanas e interurbanas. - DNA