vitoria - La consejera de Educación, Cristina Uriarte, anunció ayer que convocará el miércoles la Mesa Sectorial junto a los representantes de los trabajadores de la enseñanza pública vasca con el objetivo de llegar a un acuerdo que evite más huelgas en el sector. Uriarte visitó ayer un nuevo centro de educación infantil en Basauri, donde reiteró la disposición al diálogo de su Departamento con los sindicatos, en aras a evitar la convocatoria de nuevas movilizaciones.
“Estamos dispuestos y con ganas de trabajar” para lograr un acuerdo, dijo la consejera sin revelar si la oferta que lleve a la mesa ayudará a desbloquear el conflicto. El pasado martes día 12, la mayoría de los trabajadores de la enseñanza pública vasca no universitaria -más del 75 %, según los convocantes, y cerca del 60 %, según el Gobierno vasco- secundaron la huelga convocada por todos los sindicatos con representación en el sector, dentro de las movilizaciones que vienen programando desde el curso pasado en demanda de mejoras laborales y una educación de calidad.
Los sindicatos reclaman un incremento de la inversión, de las plantillas y los recursos en educación, una reducción de las tasas de temporalidad y del número de alumnos por aula, así como el fin de los “recortes” aplicados en salarios, sustituciones y bajas. ELA, LAB y Steilas también reivindican un modelo de inmersión en euskera que permita un alumnado euskaldun y plurilingüe, así como dejar a un lado la normativa estatal Lomce y los decretos educativos Heziberri. Estos sindicatos han advertido de que intensificarán las movilizaciones a la vuelta de las vacaciones navideñas si el departamento de Educación continúa sin dar respuesta a las demandas sindicales.
Precisamente, el sindicato Steilas advirtió ayer de que no abandonará las movilizaciones “hasta lograr algo real” y exigió “unos presupuestos dignos” porque “un año más, el gasto educativo disminuye” en el proyecto de 2018. Durante el Consejo Nacional, máximo órgano entre congresos, celebrado ayer en el Palacio Europa de Gasteiz, los congregados analizaron las últimas movilizaciones desarrolladas en los distintos sectores de la enseñanza pública. En su opinión, la valoración es “positiva, visto el apoyo y seguimiento que han tenido las diferentes convocatorias”. Por esta causa, y visto que la comunidad educativa “se ha volcado” en las movilizaciones no ha descartado continuarlas “en tanto en cuanto la Administración no plantee algo real y factible que nos devuelva, como mínimo, donde estábamos en 2009”. - DNA