IRUÑEA. Dado que el número de plazas era limitado, ha habido ciudadanos haciendo cola desde las 7.20 horas en el Palacio de Justicia para poder acceder a la sala. La mayoría eran estudiantes. El aforo se ha completado.
Este lunes y el martes las partes expondrán sus conclusiones. Ambas sesiones, cuyo inicio se fijó para las diez de la mañana, serán abiertas, aunque está prohibido el acceso de cámaras y fotógrafos y el tribunal ha adoptado medidas extraordinarias para evitar grabaciones.
De esta forma, a la sala de vistas no se puede acceder con ningún dispositivo electrónico que pueda grabar audio y/o vídeo (móviles, ordenadores, tabletas, relojes, grabadoras, bolígrafos digitales, gafas, etc.).
Para tomar notas, la Policía Foral, encargada de la supervisión por orden del tribunal, ha recomendado a los periodistas el uso de lápices o bolígrafos sencillos. En la sala de vistas habrá policías forales que procederán al desalojo de la persona que incumpla las prohibiciones.
La primera en tomar la palabra para defender su informe será la fiscal Elena Sarasate, que podría hacer una exposición de unas dos horas. A continuación, será el turno de la acusación particular y posteriormente de las acusaciones populares ejercidas por el Ayuntamiento de Iruñea y por la Comunidad Foral. El martes será el turno de las defensas.
Cabe recordar que las nueve sesiones que se han celebrado hasta ahora del juicio han sido a puerta cerrada para proteger "el derecho fundamental a la intimidad" de la denunciante, así como para salvaguardar a ella y a los cinco acusados de una "indeseada e indeseable exposición pública aireando aspectos relativos a su intimidad corporal y vida sexual" que pertenecen a la esfera personal, según acordó el tribunal.