VITORIA - El Observatorio Vasco de Inmigración Ikuspegi considera que el actual sistema de adjudicación de centros escolares entre el alumnado vasco “no funciona como sería deseable” porque no logra un reparto equitativo del alumnado de origen extranjero entre los centros públicos y concertados. Esta consideración está incluida en la investigación que el observatorio está llevando a cabo sobre La diversidad infantil en la Comunidad Autónoma de Euskadi. Las (mal) llamadas segundas generaciones.
En uno de los capítulos que ya ha concluido, titulado La diversidad en las aulas: voces desde la educación, el organismo evidencia que el actual sistema de adjudicación de centros escolares está dando lugar a desigualdades en la presencia del alumnado de origen extranjero en los colegios vascos. Según indica, en la red pública y concertada conviven “centros que no tienen ninguna persona de origen extranjero con otros que tienen porcentajes de 80%”.
En el informe, se apela a la Administración para que impulse “un proceso de reflexión” que busque la mejora de la situación de “desigual” concentración del alumnado de origen extranjero. En las conversaciones que los investigadores han mantenido con profesores, se propone al Departamento de Educación que controle los cambios de matriculaciones entre centros y que se reparta alumnado de origen extranjero en función de la realidad de su entorno inmediato.
También se plantea “como medida correctora” la asignación de más recursos humanos y materiales (profesorado de apoyo, subvención de actividades extraescolares...) a los centros con más presencia de alumnado de origen extranjero. El profesorado también demanda recursos materiales y humanos para afrontar la llegada de estudiantes de origen extranjero durante el curso ante las dificultades de idioma o el dispar nivel de conocimientos que tienen quienes se incorporan.
El informe advierte, por otro lado, de que está muy extendido en la sociedad vasca el estereotipo negativo y “falso” contra el alumnado de origen extranjero que afirma que una alta concentración de este tipo de estudiantes baja el nivel educativo del centro. Según afirma, el rendimiento escolar de un estudiante está relacionado fundamentalmente con el nivel socioeconómico y cultural de su familia, no con su origen geográfico, y con el conocimiento de los idiomas vehiculares del proceso educativo. “En consecuencia -añade-, los centros educativos que tienen alta concentración de alumnado de origen extranjero con dificultades de lenguaje penalizan los resultados escolares en el conjunto de los centros, pero nunca penalizan los resultados de sus compañeros en las aulas”. - I.A.
