Bilbao - Son los tumores que probablemente tenemos más a la vista y unos de los más desconocidos. El cáncer de cabeza y cuello se incrementará un 30% en España durante este año ya que se prevé que supere la cifra de 16.000 casos nuevos, frente a los 12.000 que se diagnostican habitualmente al año, lo que supera la media europea. Pero ni el tabaco ni el alcohol (dos de los principales causantes) se hallan detrás de esta escalada. El incremento progresivo de diagnósticos está relacionado con el virus del papiloma humano (VPH), con el agravante de que dos de cada tres casos se detectan demasiado tarde, factor que provoca que los índices de curación no alcancen el 50%.

Según los especialistas, generalmente son tumores “muy estigmatizantes” porque implican partes muy visibles del cuerpo. Además los tratamientos que se aplican provocan importantes secuelas físicas “con mucha repercusión en términos de calidad de vida y funcionalidad en la comunicación, la masticación, la deglución y la respiración”, explican.

Sin embargo, a pesar de su gravedad y de su creciente prevalencia entre la población, hay poca concienciación sobre esta patología. Para dotarla de mayor visibilidad, abordar su situación actual y las nuevas perspectivas en el tratamiento, más de 200 profesionales se han dado cita estos días en el Palacio Euskalduna en una reunión conjunta del Grupo de Tratamiento de Tumores de Cabeza y Cuello y el Grupo de Oncología Radioterápica en Cabeza y Cuello.

Bajo el término de cáncer de cabeza y cuello se incluye a un grupo de tumores malignos que se localizan en los senos paranasales, cavidad nasal, en toda la garganta incluidas las amígdalas, el paladar o la base de la lengua, así como en la laringe, en la boca y en los labios. De hecho, en Europa, el tumor más frecuente es el de laringe (40% del total).

Esta patología está íntimamente ligada al consumo de alcohol y tabaco, y existe relación entre la cantidad consumida y los años de hábito. La ingesta de alcohol aumenta un 5% el riesgo de desarrollar cáncer de laringe. Además, si el sujeto también es fumador, el porcentaje se dispara. Y es que la mayoría de la población sabe que fumar incrementa el riesgo de cáncer de pulmón, pero desconoce que también aumenta las posibilidades de desarrollar tumores en la cavidad oral y en la garganta. “La duración y magnitud del consumo está directamente relacionado con el riesgo”, advierten. No obstante, se aprecia un incremento progresivo de los tumores relacionados con el papilomavirus, especialmente en orofaringe y cavidad oral.

A nivel mundial, ocupa el séptimo lugar en frecuencia entre todos los tumores malignos, es responsable de cerca de 350.000 muertes anuales y representa aproximadamente el 5% de todos los cánceres. Aunque es más común entre los varones de 40 a 50 años, también afecta a las mujeres y a los jóvenes, el sector donde más ha aumentado. - C. Lago