vitoria - En Euskadi se venden alrededor de 15.000 unidades de la píldora postcoital, más popularmente conocida como del día después, lo que se traduce en más de 40 cada día. Desde 2009, el producto puede adquirirse sin receta en las farmacias, lo que ha provocado un notable aumento. Esta venta está teniendo un efecto positivo en la reducción del número de embarazos no deseados. Y es que la libre dispensación de la anticoncepción de urgencia se perfila como un factor decisivo en esta caída de interrupciones del embarazo.

“El patrón de uso de anticonceptivos no ha cambiado. No estamos utilizando anticonceptivos más eficaces que hace 15 o 20 años. Estamos muy parecidos e incluso algo por debajo del 1997. Usamos un poco menos la píldora, algo menos el DIU, menos la vasectomía y la ligadura. Y sin embargo, la cifra de abortos no sólo cae en números absolutos porque tenemos menos población en edad fértil, sino que también se reduce la tasa. Es decir, hay menos interrupciones de embarazos por cada mil mujeres”, aclara Iñaki Lete, jefe de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario de Araba. A su juicio, “es cierto que hay un descenso de embarazos pero si estamos usando los mismos métodos anticonceptivos que hace 20 años, es lógico pensar que la anticoncepción de urgencia tiene un efecto modulador. Los fallos del método antes no se podían contrarrestar y ahora sí, y eso explica la disminución de abortos”, sentencia .

Estas conclusiones ya fueron expuestas por algunos expertos en el Encuentro Nacional de Salud y Medicina de la Mujer, SAMEM 16 que subrayaron que “este mejor acceso a la píldora de urgencia y que las conductas reproductivas estén cambiando son algunas de las causas del descenso de abortos”. La píldora postcoital sirve para evitar un embarazo tras la relación sexual si han fallado los métodos anticonceptivos o no se han usado. Para ello debe tomarse en las primeras 72 horas.

En 2015, el número de interrupciones voluntarias de embarazo volvió a caer aunque aún no se ha realizado el recuento definitivo. Los datos oficiales son los de 2014 donde disminuyó un 12,7% con respecto al año anterior hasta 94.796, la cifra más reducida de los últimos diez años pues desde 2005, no se bajaba de cien mil abortos anuales en España. En Euskadi, el número de abortos se redujo un 28% y se situó en los niveles más bajos de los últimos años. En 2014 se practicaron 3.329 interrupciones voluntarias del embarazo, la gran mayoría en centros privados.

La CAV se sitúa, con un 8,88% por cada cien mil habitantes, por debajo de la tasa nacional que es del 10,46%. Por grupos de edad, abortaron 786 mujeres de entre 30 y 34 años, otras 717 de entre 25 y 29, 620 de entre 35 y 39, 356 adolescentes de entre 15 y 19 años y 13 menores de quince años.

“La libre dispensación de la píldora ha permitido utilizar esta medida de rescate cuando ha habido una relación sin protección o cuando el método anticonceptivo ha fallado, lo que ahorra gran cantidad de embarazos no deseados y por tanto de abortos, sobre todo en mujeres jóvenes”, considera el doctor Lete. Los datos corroboran que el mayor descenso se ha producido en mujeres menores de 19 años (con una caída de dos puntos) y en la franja entre 20 y 24 años donde ha bajado un 3%.

Sin embargo, los especialistas no se dan por satisfechos. A pesar de que la tasa de abortos baja, “todavía es alta y podría reducirse más si existiera más información sobre la píldora del día después, puesto que hay muchos mitos que dificultan a la mujer su acceso”, comenta Eduardo Satué, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria . A su juicio, “muchas mujeres llegan con dudas”. Y es que existe la creencia de que la píldora del día después es abortiva. Sin embargo, según apunta Iñaki Lete, “esto es falso ya que la anticoncepción de urgencia impide que el óvulo y el espermatozoide fecunden, por lo tanto si no hay fecundación, no hay implantación en el útero y no hay embarazo”. De hecho, resalta, “si lo hubiera, no serviría de nada tomarla puesto que no puede interrumpirlo y además no daña el embrión en desarrollo”.

Otro de los falsos mitos es que la píldora postcoital es una bomba hormonal, explica el doctor Lete: “Esto tampoco es cierto puesto que las opciones disponibles hoy en día concentran hormonas seguras y en dosis no muy elevadas”, subraya.

Caída de abortos. Según el Ministerio de Sanidad, desde 2009, cuando se autorizó la libre dispensación de la píldora postcoital, se ha reducido la tasa de abortos. Así, entre 2005 y 2009 se incrementó en un 2%, mientras que desde 2009 a 2014, bajó.

El retrato robot de la mujer que aborta de forma voluntaria se sitúa en el tramo de edad entre 20 y 24 años, con estudios de nivel superior a la Secundaria.

De forma mayoritaria, estas mujeres interrumpen su embarazo con menos de ocho semanas de gestación y lo hacen en un centro privado concertado.