L´HOSPITALET DE LLOBREGAT. El centro sanitario explica en un comunicado que el nuevo fármaco es una combinación de antirretrovirales y mantiene el 90 % de eficacia pero con la ventaja de que no tiene efectos negativos en el riñón y los huesos, como sucedía hasta ahora.

Los enfermos con hepatitis B también se podrían beneficiar de estas ventajas, ya que el fármaco al que sustituirá también se utiliza en este tratamiento.

Hasta ahora, uno de los fármacos más utilizados en el tratamiento contra el VIH es el tenofovir disoproxil fumarate, que puede causar a largo plazo efectos tóxicos en el riñón y los huesos en una pequeña proporción de enfermos, pero que se incrementa con el aumento de la edad y de comorbilidades de estos pacientes.

Ahora, un estudio publicado en la revista The Lancet ha comprobado cómo un nuevo fármaco tiene la misma eficacia en el tratamiento, pero con la ventaja de que no repercute negativamente en los tejidos de los pacientes.

El nuevo fármaco, llamado tenofovir alafenamide, no genera toxicidad a largo plazo en los tejidos de los pacientes con VIH, ya que no se metaboliza en la sangre, sino que lo hace directamente en las células linfoides.

El responsable de la unidad de VIH del Hospital de Bellvitge, Daniel Podzamczer, ha explicado que "este nuevo fármaco permite la misma eficacia conseguida hasta ahora con una mejor tolerabilidad a largo plazo" y mantiene que "es un gran avance para una enfermedad crónica como es el VIH, que necesita un tratamiento para toda la vida".