PALMA. Casi todos los ocupantes del ferry Sorrento han sido embarcados a salvo bajo la coordinación de Salvamento Marítimo en el buque Puglia, de Baleària, que se ha desviado de su trayecto original entre Ibiza y Barcelona para acudir en apoyo del operativo de rescate y sobre las 20.15 horas ha atracado en el puerto de Palma para desembarcar a los afectados.
Hacia el Dique del Oeste se ha dirigido también la ministra de Fomento, Ana Pastor, que ha viajado hasta Mallorca para supervisar la evolución del siniestro, dado que el incendio ha continuado activo durante horas.
Fuentes de Salvamento Marítimo han confirmado a Efe que está preparado el dispositivo de prevención preceptivo ante la posibilidad de que el incendio dañe el ferry hasta el punto de causar su hundimiento con toda su carga.
La organización ecologista Oceana ha resaltado que el barco está en una de las zonas más importantes para la biodiversidad marina en el Mediterráneo, propuesta para su protección debido a su riqueza en especies como la posidonia, el coral amarillo o los lirios de mar.
Solo dos del total de personas que iban a bordo del Sorrento han requerido atención médica urgente, por lo que han sido trasladados a un hospital de la capital balear en helicóptero.
Una de ellas ha sido un italiano de 25 años por la inhalación de humo de carácter leve y la otra un filipino que ha sufrido una crisis de ansiedad, y en los casos fueron dados de alta.
Personas de doce nacionalidades viajaban en el Sorrento, que contaba con unos 45 tripulantes y en el que la mayoría de los pasajeros, casi 80, eran camioneros que viajaban hacia Valencia con sus vehículos.
El Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de la capital balear recibió el aviso de un incendio a las 13.50 horas.
En un primer momento el capitán no consideró necesaria la evacuación del buque, pero dado que no se pudo controlar el incendio con los medios disponibles, finalmente ordenó arriar los botes salvavidas y abandonar la nave.
Hasta el lugar se han desplazado los barcos de Salvamento Marta Mata, Sar Mesana, Guardamar Caliope y Salvamar Actrux, además de un helicóptero Helimer 213, dos barcas de la Guardia Civil y otro helicóptero de este cuerpo.
A su llegada al puerto de Palma, los rescatados han sido atendidos por personal de la Cruz Roja que han puesto a su disposición mantas y sillas de ruedas y también se ha habilitado un servicio de atención psicológica para aliviar el estrés que la situación puede haber provocado en algunos de los viajeros.
Les esperaban, entre otras autoridades políticas, el presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá, el alcalde de Palma, Mateo Isern, y la delegada del Gobierno en Baleares, Teresa Palmer.
Palmer ha declarado que la prioridad ha sido el salvamento de las personas a bordo y ha explicado que cuando el dispositivo de auxilio ha llegado a la posición del Sorrento se ha encontrado con un incendio "mayor de lo previsto" y con parte del pasaje ya evacuado en lanchas de emergencia.
El jefe de Salvamento Marítimo en Baleares, Miguel Félix Chicón, ha explicado que la decisión de abandonar el barco ha sido adoptada aproximadamente una hora después de haberse iniciado el fuego.
"Toda la tripulación y el pasaje han abandonado el buque en los botes salvavidas y las balsas, menos 6 tripulantes que han sido rescatados posteriormente por el helicóptero", ha detallado Chicón.
Trasmediterránea ha dispuesto hoteles para todos los pasajeros evacuados y ha anunciado que organizará sus traslados de regreso atendiendo a lo que cada uno de ellos solicite.
Hace casi ocho años, en julio de 2007, un carguero de la compañía Iscomar, el Don Pedro, se hundió con 150 toneladas de fuel a una milla del puerto de Ibiza después de chocar contra un islote. Sus 18 tripulantes fueron rescatados.
