vitoria - Una mesa de negociación in extremis y cuatro horas de reunión no fueron ayer suficientes para desactivar la huelga convocada en la sanidad pública vasca este jueves y viernes. Más de 30.000 trabajadores de la mayor empresa de Euskadi están llamados a secundar estos paros por la guerra laboral abierta. El nuevo intento de acercamiento fue infructuoso a pesar de vivirse uno de los momentos de mayor conflictividad. La portavoz del sindicato de enfermería SATSE, Encarna de la Maza, aseguró que se han encontrado “más de lo mismo” por parte de la dirección del servicio vasco de salud. Osakidetza les entregó un calendario de negociación con un próximo encuentro para mayo, “por lo que asumen que se van a mantener las dos jornadas de huelga”, zanjó.
Estas movilizaciones toman así el relevo a las cuatro jornadas de paros parciales celebrados en noviembre y a la jornada de huelga general organizada el pasado cuatro de diciembre cuyo seguimiento se cifró en un 11%. La mesa sectorial convocada ayer a solo tres días de que los sindicatos intenten paralizar la sanidad vasca, no fue capaz de zanjar casi dos años de desencuentros en una brecha que separa cada vez más al departamento y a los sindicatos con posiciones irreconciliables. Las centrales reclaman, entre otras medias, la sustitución del personal desde el primer día, la reducción de jornada, una oferta de empleo para “las 3.000 plazas que se han destruido” y el cumplimiento del compromiso de desarrollo profesional, de acuerdo con lo establecido en 2011.
En este sentido, Encarna De la Maza explicó que la Dirección de Osakidetza ha mantenido las mismas posturas en las materias esenciales, como las relativas al número de plazas de las Ofertas Públicas de Empleo (OPE) anunciadas. “Volvemos a las declaraciones de intenciones. No hay una verdadera voluntad para tratar en serio estas materias”, criticó.
En la misma línea, Peio Igeregi (ELA) lamentó la falta de avances en cuestiones como “empleo, cargas de trabajo y calidad del servicio”. “Queremos hablar para que se nos escuche, pero nos van a obligar a gritar el jueves y el viernes”, puntualizó. Desde UGT, Ana Vázquez denunció que Osakidetza “mantiene los recortes”, lo que supone que “no tienen intención de mejorar las cargas de trabajo y apostar por una sanidad de calidad”. Con ello, advirtió de que “da más motivos para la huelga del 23 y el 24”.
Por su parte, LAB acusó a los responsables de Osakidetza de mantener un “chantaje puro y duro” ya que trasladaron que la convocatoria de desarrollo profesional del 2011 “solo se finalizará y abonará las cantidades adeudas si previamente hay acuerdo sindical”. En parecidos términos se pronunció CCOO, que calificó la reunión de “lavado de manos” de Osakidetza con el objetivo de desactivar la huelga.
paga extra de 2012 Mientras tanto, Osakidetza apeló reiteradamente al consenso. Así ayer basó su nueva oferta en la negociación de las bases de la OPE 2014-2015, la reactivación del desarrollo profesional desde el 1 de octubre de 2015, un acuerdo de sustituciones del personal, un nuevo acuerdo de movilidad interna, y otro de contratación de eventuales. Fuera del ámbito de la mesa de negociación, informó que este mes abonará la paga extra de diciembre de 2012.
El director de Recursos Humanos de Osakidetza, José María Armentia, defendió la “voluntad de seguir buscando relaciones conjuntas”, pero sin que eso signifique “parar la organización”. En este sentido, planteó que se debe poner en marcha la OPE y los procesos de movilidad porque no se puede “ralentizar la marcha de la organización”.
Para “seguir dando pasos”, Osakidetza propuso a los sindicatos un calendario de negociación que comience a primeros de mayo, en el que estarán sobre la mesa las propuestas que la dirección del ente defendió ayer.
Sobre la OPE, planteó la posibilidad de que los sindicatos formen parte de los tribunales calificadores. Sin embargo, Armentia aseguró que no existían variaciones en relación al número de plazas ofertadas.
Asimismo, subrayó el compromiso del Gobierno Vasco, con “un gran esfuerzo económico”, de reactivar la carrera profesional de los trabajadores, de modo que ésta se comience de nuevo a retribuir a partir del 1 de octubre. Además, ofreció una mejora en la cobertura de las bajas de los profesionales, de tal forma que pasen a cubrirse desde el cuarto día y no desde el séptimo.
En el ámbito de la atención primaria la cobertura de la baja sería desde el día siguiente para los médicos con un cupo máximo de pacientes, a excepción de las vacaciones de verano, Semana Santa y Navidad. En la atención especializada y dentro del ámbito hospitalario, Osakidetza propuso que se cubran las bajas a partir del cuarto día y para el personal que trabaja a turnos. Se cubrirían desde el primer día las de enfermeras y auxiliares de enfermería de urgencias, UCI, quirófanos, hospital de día, endoscopias y neonatología.