PARÍS. Jean-Paul, un residente de la localidad de Méolans-Revel, ha explicado que el avión le ha llamado la atención. "He visto un avión que volaba un poco más bajo de lo normal" aunque "estaba a unos 4.000 metros de altitud por lo que, para mí, no había nada de inquietante".

El alcalde de Prads Le Bléone, Bernard Bartoleni, ha explicado que el siniestro se ha producido a "una altitud de más de 2.000 metros y que es de difícil acceso".

"Nadie puede informar nada porque estamos a dos horas y media del último lugar habitado y el macizo se sitúa en plena montaña", ha aclarado. Según este edil, "el tiempo estaba cubierto sin ser catastrófico" esta mañana en la zona, "muy montañosa y escarpada".

El alcalde de Méolans-Revel, Daniel Million, ha dicho que desde esta localidad próxima al lugar del siniestro "no se puede ver nada". Según ha explicado, el avión se habría estrellado "detrás de una cima".

Desde Météo France, el servicio meteorológico francés, se ha informado que las condiciones eran "particularmente tranquila" en el momento del siniestro. "Las condiciones eran incluso óptimas con un tiempo seco y un cielo totalmente despejado durante toda la mañana", ha señalado. "El viento era escaso, prácticamente nulo, y no había nubes 'peligrosas' como cumulonimbos", ha añadido.