valencia - El arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha propuesto vender algunos bienes patrimoniales de la Iglesia para atender a los pobres, así como dedicarles el 10% de los presupuestos de la diócesis, y ha sugerido la posibilidad de compartir viviendas para ayudar a madres solteras, gestantes o a mujeres víctimas de malos tratos.
En una carta pastoral dirigida a la archidiócesis de Valencia y publicada ayer, viernes, en el semanario Paraula, el cardenal Cañizares recuerda que se abre “un gran panorama para ejercitar la señal que identifica a los cristianos: la caridad” y agrega: “Habremos de poner todo nuestro empeño en la imaginación y la creatividad de la caridad”.
Además, urge a “ser samaritanos en medio de las nuevas pobrezas”, ante la “grave y dolorosa situación social y económica por la que atraviesa Valencia”, según ha informado el Arzobispado de Valencia a través de un comunicado. En el mismo texto, Antonio Cañizares señala que los cristianos y las instituciones de Iglesia están “en la vanguardia de mostrar verdaderos signos de caridad y justicia”.
sugerencias Así, el arzobispo de Valencia apunta distintas “sugerencias” que podrían llevarse a cabo al preguntarse: “¿por qué en los presupuestos de la diócesis y de sus instituciones no se dedica un tanto por ciento (el diezmo de los mismos) a atender a los pobres?”
“¿Por qué no se venden algunos de los bienes patrimoniales de la Iglesia y se destinan a los pobres?”, prosigue la carta pastoral de Antonio Cañizares, quien también se pregunta por qué no se estudia en qué forma se pueden compartir algunos bienes -como viviendas- para usos sociales, “por ejemplo, a pisos de asistencia a madres solteras, madres en gestación que no quieren abortar, mujeres víctimas de malos tratos doméstico”.
El cardenal también sugiere la posibilidad de hacer algo, “con la colaboración de empresarios católicos y de buena voluntad, con sensibilidad social” para crear “uno o dos puestos de trabajo” en cada una de sus empresas. - Efe
