Alfonso, Ramón y María Teresa llegan a Euskadi desde Perú, Bolivia y Colombia, respectivamente. Viven en diferentes entornos, pero todos ellos tienen un nexo común: trabajan con personas en situaciones difíciles y, con su labor tratan de mejorar la vida de estos colectivos gracias a proyectos de cooperación al desarrollo que impulsan diferentes instituciones vascas.

Ellos son solo una parte de los 15 trabajadores sociales de Colombia, Bolivia y Perú que, hasta el próximo día 15, participan en el encuentro Personas, Empresa y Cooperación al Desarrollo impulsado por Zabalketa y Ner Group, que tiene lugar en Getxo. Durante diez días, estos trabajadores conocerán el funcionamiento de diversas empresas de cooperación al desarrollo de Euskadi en una experiencia que también servirá para que tanto representantes sudamericanos como vascos compartan impresiones y conocimientos. "Este encuentro sirve para mucho más que para que ellos vean cómo trabajamos. A nosotros nos sirve también de proceso de reflexión, porque buscamos analizar un modo novedoso de hacer las cosas que se centra en las personas, en la transparencia, la responsabilidad y el trabajo en equipo", explica Jaime Bernar, director de proyectos de Zabalketa.

rEFERENTE EN gESTIÓN En una de las iniciativas impulsadas por el Gobierno Vasco en las que toma parte Zabalketa, trabaja Alfonso Méndez. Él, a través de una institución local, intenta mejorar las condiciones de vida de los colectivos más desfavorecidos de la ciudad peruana de Cuzco. "Este encuentro supone una gran oportunidad para conocer Euskadi. Para nosotros Bilbao es un referente en gestión y desarrollo local por las iniciativas que han impulsado a lo largo del tiempo. Hay cosas que, contextualizadas en nuestra realidad, podemos implementar allí", reconoce este trabajador social.

En este mismo sentido, se pronuncia Ramón Ledesma, un boliviano que trabaja con la población aymara que vive gracias a la agricultura de subsistencia en el Altiplano de La Paz. "En Euskadi están abordando las mismas cuestiones que nosotros trabajamos día a día. Tenemos problemas comunes, pese a tener territorios bastante diferentes", indica Ledesma. Por esa misma razón, porque pese a las grandes distancias kilométricas, las problemáticas son similares -pobreza, marginalidad, violencia de género...-, estos trabajadores sociales llegan a Euskadi en busca de iniciativas que les sirvan para sacar aún más partido a los fondos que las instituciones vascas aportan a sus proyectos. "La institucionalización, la eficacia, la eficiencia... Nos vienen muy bien, sobre todo, porque trabajamos con fondos públicos y tenemos que tratar de sacar el máximo rendimiento posible a esos fondos", señala Méndez.

Fondos que también llegan hasta Medellín, donde María Teresa Gómez trabaja en una zona en el que los carteles del narcotráfico colombiano están haciendo muchísimo daño. "Nos encontramos mujeres esclavizadas, que se han quedado viudas y han tenido que cargar con toda la responsabilidad familiar. Trabajamos para que rescaten su identidad, sus valores y generen entidades productivas para salir adelante", describe Gómez.

En mitad de estos escenarios, el trabajo en pos de las personas es una iniciativa básica y muy necesaria. Ejemplos en esta materia es lo que les pueden mostrar Ner Group y Zabalketa a lo largo de este encuentro. "Para nosotros el centro son las personas porque sin ellas la empresa no tiene sentido. Nuestra misión solo se entiende, además, si todos los ciudadanos del mundo tienen los mismos derechos, por tanto, hay que actuar en esos lugares donde se vulneran esos derechos", señala el director de proyectos de Zabalketa.

aPRENDER E iNTERACTUAR Estos diez días serán intensos, de visitas a empresas y charlas formativas que coparán las agendas de los participantes en el encuentro. "Van a poder ver muchas cosas, sobre todo, aspectos que funcionan en la práctica. Nos hemos centrado en la práctica para que vean cómo funcionan estas nuevas relaciones en empresas competitivas de Euskadi", explica Bernar.

Ver, observar y participar en las decisiones a diferentes niveles de estas compañías, todo eso será lo que ayude a esta quincena de trabajadores sociales sudamericanos a ver iniciativas adaptables a sus proyectos. "Venimos a aprender mucho de la experiencia que tienen las instituciones vascas y ver métodos aplicables en nuestras zonas ", explica el boliviano Ramón Ledesma.

Pero, en este encuentro, otra forma de aprender y progresar es interactuando, charlando los unos con los otros y compartiendo experiencias. En ese aspecto, la conexión ha sido casi instantánea. "Desde el primer momento ha habido un diálogo muy fluido que nos ha permitido ver cuáles son las prioridades , los problemas que hay en cada uno de sus contexto y abrir la mente", describe Bernar.

Ampliar miras y ver las distintas maneras que hay de atacar una misma problemática es la forma de que estos profesionales progresen y sean cada vez mejores en su oficio. "Trabajar con estas personas es un placer y se puede aprender mucho de todas ellas, estoy segura de que esta experiencia va a ser muy positiva para todos nosotros", destaca María Teresa Gómez, una de las manos que estos días se unen en Euskadi, para ser cada vez más eficaces en el camino hacia el desarrollo de los más desfavorecidos.