bruselas. "El premio ciudadano europeo es un galardón excepcionalmente importante y todos los que están aquí representan lo mejor de la Unión Europea, algo que se necesita más que nunca". Con estas palabras el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, reconoció ayer la labor y la trayectoria de los 43 premiados procedentes de 21 países que recibieron el Premio Ciudadano Europeo 2013 en un acto celebrado en Bruselas. Premios a la diversidad lingüística, la juventud, los derechos de las minorías, el diálogo intercultural o la educación. Todos con la cooperación transnacional como valor central y entre ellos Euskaltzaindia. "Ustedes son los verdaderos héroes en la integración europea", alabó.
Andrés Urrutia, presidente de la academia vasca de la lengua y encargado de recibir el diploma, confía ahora en que el reconocimiento les dará visibilidad y permitirá a Euskaltzaindia buscar aliados en Europa con los que crear redes de trabajo y reforzar el euskera. "Este premio nos da la oportunidad de hacernos ver en Europa, de mostrar que tenemos algo que decir", reivindicó poco antes de participar en una ceremonia que también premió a la Plataforma Antideshaucios.
contactos a alto nivel De ahí que su agenda en la capital comunitaria también incluye reuniones con eurodiputados, representantes de organizaciones que trabajan en torno a lenguas minorizadas y funcionarios europeos. Ayer lo hizo con el eurodiputado corso, François Alfonsi, ponente del informe sobre lenguas amenazadas y diversidad lingüística en la UE, aprobado en junio pasado por el Parlamento Europeo y a quien invitó a conocer la sede de la academia, y hoy lo hará con la responsable de multilingüismo de la dirección general de educación de la Comisión Europea.
Con todos ellos, un mismo objetivo: llenar un vacío existente hasta ahora e impulsar acuerdos y proyectos con otras lenguas europeas minorizadas como el frisio, el occitano, el bretón o el galés. "Tenemos que ver qué tipo de estructuras tenemos cada uno, nuestro tamaño y el premio nos puede dar el empujón que necesitamos, abrir nuevas puertas en Europa", explicó. El presidente de Euskaltzaindia, que dispone actualmente de un presupuesto de tres millones de euros, explicó que echa en falta un mayor esfuerzo por parte de las instituciones europeas pero admitió que hasta ahora es una puerta a la que no habían llamado.
merecido reconocimiento Tal y como ya apuntó en septiembre pasado, durante la ceremonia organizada en la sede del Parlamento Europeo en Madrid, el galardón es un premio a décadas de trabajo, a toda una historia, que pronto celebrará su centenario, al esfuerzo de muchas personas y al papel del euskera y la cultura vasca desde una perspectiva inclusiva, "no de confrontación sino de conciliación y búsqueda conjunta de soluciones" porque "nosotros nunca hemos defendido esa confrontación entre lenguas, al contrario siempre hemos procurado tener muy buenas relaciones con las lenguas que se utilizan habitualmente en el País vasco", destacó en declaraciones a los medios de comunicación.
Urrutia también recordó que la academia vasca ha conseguido trabajar a los dos lados de la muga, que tiene como lenguas de trabajo tres lenguas, euskera, castellano y francés y que eso es precisamente el elemento enriquecedor. "Se reconocen 95 años valorando y valorizando el euskera y la cultura vasca en todo lo que es Euskal Herria a uno y otro lado de la frontera, actuando bajo diferentes legislaciones y promoviendo un espacio común entre todos los vascos. Un espacio de acercamiento a la lengua y la cultura desde una perspectiva absolutamente inclusiva", recalcó.