Rivabellosa. La localidad de Rivabellosa vivió ayer una jornada de recuerdos que coincidió con la festividad de su patrona, la Virgen del Rosario. Junto a las celebraciones de la asociación de la Tercera Edad, el pueblo recordó también que se cumplían 350 años de la construcción de la iglesia dedicada a la patrona, así como 550 años de un acontecimiento que fue el impulsor de la creación de la provincia de Álava.
Y es que la historia de las Juntas Generales comienza en 1463. Durante el final del verano y los primeros días del otoño de ese año, un jurista nombrado por Enrique IV y 16 procuradores de distintas hermandades redactaron en Rivabellosa 60 Ordenanzas que relegaron al olvido a las de 1458 y constituyeron el cuerpo fundamental de las leyes de Álava durante 400 años, el Cuaderno de Ordenanzas de Hermandades, en el cual se incluían localidades como Miranda de Ebro. Para celebrarlo, la sala de cultura acogió una charla y tras la misa del mediodía se acudió con los txistus al monolito que rememora aquel acontecimiento.
