murcia. Tres turistas españoles murieron anteayer después de que la furgoneta turística en que viajaban colisionara con un camión a la altura de la zona de Ngokomi, en la autopista entre Nairobi y Mombasa. En el vehículo, que se trasladaba a Nairobi procedente de Mombasa, colisionó con un camión que iba en dirección contraria, viajaban cinco españoles y un conductor de nacionalidad keniana. Los tres trabajaban como profesores en Murcia.

Así, dos de los fallecidos eran los cartageneros Juan Salvador Asensio Ramos, jefe de estudios del instituto de La Manga, y Dolores Fernández Moreno, funcionaria municipal que trabajaba en la Universidad Popular y coordinaba además el ciclo literario La Mar de Letras, del festival internacional La Mar de Músicas. La tercera fallecida, Pilar Naranjo, era nacida en Puertollano (Ciudad Real), pero residente en la localidad murciana de San Pedro del Pinatar. Era profesora de latín en el instituto Mar Menor desde hace, al menos, diez años y en la actualidad era también la jefa de estudios.

El varón falleció en el acto, mientras que dos mujeres perdieron posteriormente la vida en el hospital del subdistrito de Sultan Hamud, en el que habían sido ingresadas en estado crítico. Otras dos mujeres y el conductor resultaron heridos leves. Las dos mujeres heridas son la esposa del fallecido, también de Cartagena, y una mujer de Alicante, y los ilesos, un hombre de Jaén, otro de Cartagena y dos hermanas de Murcia capital. Los fallecidos estaban en el país africano de viaje y volvían de un safari turístico por la carretera que une las ciudades de Mombasa, al sureste del país, y Nairobi, la capital, cuando se produjo el accidente. Según la Policía, el accidente se produjo después de que el camión intentara adelantar a otro vehículo de forma ilegal, razón por la que ayer el conductor fue detenido.

Los dos conductores, que iban a gran velocidad, intentaron evitar el choque frontal, pero se salieron de la carretera y colisionaron a pocos metros de la autopista. Los dos conductores fueron acusados de incumplimiento de las normas de tráfico. El proceso de repatriación de los cadáveres se vio entorpecido por el cierre al tráfico aéreo del aeropuerto de Nairobi, el más importante del África oriental, que tuvo que ser clausurado por un gran incendio en sus instalaciones el pasado miércoles.

Las repatriaciones están entorpecidas por el cierre del aeropuerto de Nairobi, que sufrió un incendio esta semana