Vitoria. El número de familias gasteiztarras que desde que estalló la crisis se han visto obligadas a recurrir a las ayudas públicas no para de aumentar. La situación comienza a ser ya preocupante en la ciudad, a la vista además de que el contexto económico y laboral tampoco tiene visos de mejorar a corto plazo. Según reconoció ayer la concejal vitoriana de Políticas Sociales, Ainhoa Domaica, el número de perceptores de Ayudas de Emergencia Social (AES) ha experimentado un aumento "espectacular" en la capital en lo que va de 2013, en el que ya se ha gastado el 70% de la partida presupuestaria destinada a este fin. Más de 1,4 millones de euros de los 2,08 que el Gobierno Vasco, la institución que financia estas ayudas, ha aportado para todo este ejercicio al Ayuntamiento. A este ritmo, "es evidente que no se va a llegar a final de año", según reconoció Domaica, quien a pesar de todo mandó un mensaje de "tranquilidad" y "prudencia" a la ciudadanía.
La responsable municipal achacó este importante desfase a los cambios recientes que ha experimentado la normativa de las AES. Ni a la crítica situación económica ni a los constantes recortes, tal y como sí hizo la edil de EH Bildu Iratxe López de Aberasturi, quien cuestionó a Domaica sobre este asunto en la comisión del ramo. "Las instituciones no pueden seguir mirando a otro lado mientras la gente está con el agua al cuello", censuró López de Aberasturi. Domaica apuntó, en primer lugar, a la forma de evaluar el patrimonio de los potenciales receptores, que ha vuelto a establecerse en un máximo de 40.000 euros para acceder a las AES porque la última modificación normativa -el anterior Ejecutivo Vasco redujo la cuantía a sólo 8.000- vulneraba la Ley de Garantía de Ingresos. Además, Domaica aludió a la ampliación del plazo temporal de cobro de dos conceptos de ayuda, el gasto de mantenimiento de vivienda y el de endeudamiento previo, que el año pasado estaba establecido en un máximo de seis meses y en éste se ha ampliado a doce, lo que también ha disparado el gasto.
En lo que sí coincidieron tanto el Gobierno municipal como la oposición es en calificar como sumamente relevante el incremento de perceptores. Los datos, desde luego, saltan a la vista. En lo que va de año, 2.883 gasteiztarras han cobrado AES, cuando el año pasado por estas fechas sólo lo habían hecho 1.541. Por aquel entonces el gasto municipal ascendía a poco más de 620.000 euros, menos de la mitad que este año.
Domaica informó de que ya ha iniciado conversaciones en torno a esta cuestión con el consejero de Política Social, Juan Mari Aburto, y que el "compromiso" del Gobierno Vasco es estudiar una aportación extraordinaria a las arcas municipales para poder sufragar todas las ayudas, un problema que se ha extendido ya a numerosos ayuntamiento vascos. "Vamos a garantizarlas haciendo un esfuerzo", insistió Domaica, quien evitó generar "alarmas innecesarias". Por el momento, Lakua aguardará a la evolución de la recaudación de agosto para abordar este asunto.