gasteiz. El diputado general de Álava, Javier de Andrés (PP), afirmó ayer que la Denominación de Origen Calificada (DOC) Rioja "es un buque que no pueden abandonar" los vinos alaveses ya que salirse de esa marca "con tanto prestigio nacional e internacional" es un "disparate". En la habitual rueda de prensa tras el Consejo de Diputados, el jefe del Gobierno foral afirmó que, aunque los caldos del territorio histórico en su conjunto tienen un nivel excelente que está por encima de la media de calidad del vino del ámbito Rioja, eso no quiere decir "que no sea importante pertenecer a una "gran" Denominación de Origen con prestigio nacional e internacional.
Señaló que la idea de crear una propia zona diferenciada para Rioja Alavesa y salirse de la DOC Rioja, como dijo que estudia la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantza Tapia, "es un disparate que no tiene ningún fundamento" y "sería muy contrario al interés de los bodegueros y los viticultores". Pese a que De Andrés declaró que "hay que prestigiar el vino alavés y poner en valor aquello que se produce en Álava", añadió que el sector del vino es consciente de que la Denominación Rioja es "un buque que no se puede abandonar".
Transporte a la demanda En otro orden de cosas, la Diputación foral de Álava dio ayer el plácet a la prórroga del contrato del servicio de transporte de viajeros a la demanda para el territorio histórico. Este recurso funciona desde hace 12 años y permite que los habitantes de los pueblos alejados de las paradas de las líneas regulares de transporte de viajeros de titularidad foral pueden llamar a un taxi para que éste les acerque hasta la parada de autobús más cercana. Además, desde el curso 2012/2013, el servicio también ha comenzado a incorporar algunos recorridos de transporte escolar, hasta ahora prestados por el Gobierno Vasco, con el objeto de buscar mayor eficiencia en la utilización de los recursos públicos.
En estos momentos, los principales usuarios de esta herramienta de transporte público son escolares, amas de casa, trabajadores y jubilados que, en la mayor parte de los casos, carecen de vehículo propio para sus desplazamientos. El coste para ellos es de 1,70 euros por cada uno de los servicios de taxi.
Según explican fuentes de la Diputación Foral de Álava, en julio de 2012 se adjudicó un concurso para la prestación de este servicio, con un plazo de duración de un año prorrogable por el mismo tiempo. Transcurrido el plazo de un año y para seguir ofreciendo el servicio, el Consejo de Diputados acordó ayer prorrogar el contrato vigente hasta el 31 de diciembre de 2013 por un importe de 152.045,86 euros.
