Vitoria. El portavoz del PNV en el Ayuntamiento de Vitoria, Gorka Urtaran, aseguró ayer que el pacto presupuestario cerrado el pasado mes de enero con el PP está dando resultados y, por tanto, los jeltzales creen que "las cosas van razonablemente bien" en Gasteiz. A juicio de Urtaran, el acuerdo les ha permitido poner un torniquete a la política de recortes sociales aplicada por el PP en su primera etapa de mandato.

El portavoz del PNV dibujó un negro panorama del periodo de gobierno en solitario de Maroto, caracterizado por "el ocultismo, la arbitrariedad y el incumplimiento de la palabra dada", amén de una política de recortes en materia de "cultura, educación, política social, empleo público" y, en definitiva, de "las políticas que sustentan el bienestar de los ciudadanos".

Urtaran recordó además los 17 millones de euros "tirados al agujero de la plaza de Euskaltzaindia", donde se iba a construir el BAI Center y ahora irá la estación de autobuses, un proyecto que el PNV no comparte pero que no obstaculizará. También citó "la disolución incontrolada" de la Arich (Agencia de Renovación del Casco Histórico), que ha supuesto la parálisis de los proyectos en el barrio medieval, o el freno a la iniciativa europea Urban.

Todo esto cambió con el pacto del 22 de enero, "fecha clave" de la legislatura, después de que el alcalde, presionado por huelgas y protestas ciudadanas, lanzara un "órdago" al PNV y el grupo municipal nacionalista respondiera con un Presupuesto alternativo. Ese fue el inicio del viraje "de 180 grados" que ha hecho que el Ayuntamiento pase de "ser un problema a intentar buscar soluciones", gracias a los jeltzales y en opinión de ellos mismos. Urtaran, que advirtió a Maroto de que seguirá "vigilante" ante su actuación, recordó que el acuerdo ha permitido elevar las partidas destinadas a cooperación al desarrollo, Igualdad, euskera, inclusión social, educación o inversión en barrios y zona rural.

las cuentas de 2014 No todo ha sido un camino de rosas, en todo caso, porque en un pacto "todas las partes deben ceder". En ese sentido, Urtaran afirmó que no es éste el momento de gastar cinco millones de euros en la reforma de la Avenida, pero en todo caso el balance del acuerdo es bueno y por ello el PNV afronta la próxima negociación presupuestaria, si no con optimismo, sí a la expectativa. Urtaran aboga por un gran pacto entre los cuatro grupos municipales y por el desarrollo de un debate sobre ingresos y gastos antes de cerrar un Presupuesto para 2014.

Según el portavoz jeltzale, la Ley obliga a Maroto a tener listo un proyecto de Cuentas para el 15 de octubre, los técnicos se ponen a trabajar en el tema en junio y, por lo tanto, para septiembre debería haber ya unas líneas generales sobre las que trabajar durante este mes y la primera quincena de octubre. Urtaran cree fundamental que se produzca el citado debate sobre los ingresos y los gastos, y que se abra el mismo a la participación ciudadana, de tal forma que "si se va a pedir un esfuerzo económico todo el mundo sepa a qué se da a destinar". Según el PNV, "ha habido un déficit de participación, hay que dar más margen a los colectivos sociales y que el Ayuntamiento dé respuesta a sus peticiones", y por ello entiende que el Consejo Social del municipio debe ser "importante" a la hora de diseñar el próximo Presupuesto.