bermeo. La Unidad Canina de la Ertzaintza acompañó ayer a los equipos técnicos de Emergencias durante el desescombro de los inmuebles colapsados. Su intención era revisar la zona del siniestro para verificar que ninguna persona había quedado atrapada entre las ruinas. Según fuentes del departamento de Seguridad, nadie había denunciado la falta o desaparición de un familiar, vecino o conocido, por lo que estaba prácticamente descartado que hubiera heridos o víctimas mortales entre los restos de los once edificios siniestrados.
Los Bomberos de la Diputación Foral de Bizkaia dieron por finalizado el incendio después de permanecer toda la noche refrigerando los restos para evitar que una posible pavesa, escondida en el interior de una traviesa, de una viga o de un tejado, iniciara un nuevo foco.
Durante la mañana de ayer, los equipos técnicos de emergencias comenzaron con las labores de desescombro para asegurar la zona. Los miembros de la sección canina de la Policía vasca se desplazaron hasta el lugar y acompañaron a los técnicos para inspeccionar los escombros.
Varios perros adiestrados y con experiencia en la búsqueda de personas tras derrumbes o avalanchas, ya sean producidas por desastres naturales o por este tipo de accidentes, rastrearon los tres solares en ruinas de la calle Nardiz'tar Jon en busca de posibles víctimas personales. Afortunadamente, y, a pesar de la magnitud de la catástrofe, no hubo víctimas.