Los estudios realizados por el Grupo Zooprofílico de Turín (Izsto) concluyeron ayer que los productos embargados por la Sanidad italiana a la multinacional alimenticia Nestlé no contienen carne de caballo en su composición. El Ministerio de Salud anunció que pondrá en circulación los productos retirados el pasado 21 de febrero. La multinacional negó que los productos que vende en Italia contengan carne de caballo después de que decidiese retirar algunos de sus productos en Italia y España por estar bajo sospecha de contener carne con genética procedente de los equinos. La Unión Europea reforzará los controles para conocer de dónde procede el fraude de la carne de caballo que ha escandalizado a toda Europa.