Por fin. A partir de esta mañana y durante todo el fin de semana el azul del cielo se dejará ver en el territorio alavés por primera vez en varias semanas, las temperaturas subirán y la lluvia, al menos en principio, no hará acto de aparición. Y caprichos del calendario, la mejora del tiempo coincidirá con dos días de plena actividad para confeccionar un programa de actividades variado con el que disfrutar a pleno rendimiento del aire libre, y sobre todo seco.
La primera cita es el Uztaberri Eguna, la fiesta del vino de Rioja Alavesa que tiene como sede fija Lapuebla de Labarca. La buena gastronomía para acompañar a los caldos de la tierra y los diferentes talleres y actividades serán el reclamo para una cita de la que se podrá disfrutar desde primera hora de la mañana.
El segundo punto del programa de ocio para el fin de semana también tiene su atractivo en el paladar. En este caso se trata de la III Fiesta del Cordero Lechal de Euskadi, una cita solidaria que se celebrará en las tres capitales vascas, en cada una de las cuáles se repartirá un millar de pintxos de cordero a un euro la pieza, una cantidad que se destinará íntegramente a los enfermos de esclerosis múltiple del territorio, idéntico fin en el que se invertirá el dinero recaudado en Donostia. En Bilbao, la cuantía de cada uno de los mil pintxos irá a parar a las maltrechas arcas de Cáritas Bizkaia, una de las asociaciones que más desbordadas se están viendo por la crisis. En la capital alavesa, la fiesta se celebrará en la plaza del Machete, donde se instalarán las parrillas en las que los corderos irán dorándose hasta ponerse a punto. Este entrañable animal es la estrella de la fiesta, pero como no hay feria gastronómica en Euskadi en la que falten suculentos maridajes, los asistentes podrán adquirir quesos de Idiazabal, sidra, txakoli, vino de Rioja Alavesa y, cómo no, el buen pan que debe acompañar, sí o sí, al jugoso manjar que protagoniza la jornada. Se va haciendo la boca agua según se desgranan las actividades que ofrece el territorio este fin de semana, pero aún hay más alternativas para llenar la barriga bajo los tímidos rayos de ese sol de febrero que tan bienvenido va a ser. A partir de las 10.00 horas, en el Iradier Arena, abrirá sus puertas la VI Feria de la trufa negra de Álava, un acto que gira en torno al hongo más exclusivo, que aúna la sabiduría rural y la elegancia urbanita, ese condimento que nunca podrá adquirir la categoría de plato principal pero que, en crudo y sin ningún tipo de aditivo, ennoblece a la más humilde de las preparaciones con la simple ayuda de un rallador. Y si la propuesta que queremos aderezar es ingeniosa y preparada con cariño, el resultado raya lo sublime.
para chuparse los dedos Pongamos por ejemplo el mil hojas de crema de queso con trufa negra, la tortilla de patata de Álava trufada con huevos de caserío vasco trufados, el taco de chuletón eusko label con virutas de trufa negra o las brochetas de pollo de caserío vasco con miel, cebolla caramelizada y trufa negra. Todas estas tentaciones estarán a disposición de los paladares de los alaveses en el coso vitoriano, en un acto que contará con una exhibición en la que diferentes profesionales alaveses mostrarán en vivo y en directo qué se puede hacer en la cocina con este manjar, por ejemplo las alubias del País Vasco con guindilla de Ibarra y trufa negra de Álava. Se celebrará también una exhibición de búsqueda. Sus protagonistas esconderán varias trufas en una piscina de tierra y perros adiestrados se encargarán de sacarlas a la superficie, y se instalará un año más el espacio Trufa Selecta, donde especialistas en la materia solventarán todas las dudas de los asistentes con respecto a un hongo que en Euskadi es imposible encontrar más allá de las fronteras del territorio alavés. Los asistentes podrán llevarse a casa diferentes productos aderezados con trufa, como el aceite de oliva, la crema gazta zaharra o la crema de morcilla.
Y ya a las 18.00 horas, el acto estelar de la jornada. La gran subasta de trufa negra, abierta a hosteleros y particulares, concederá al mejor postor medio kilo de este aromático producto. Eso sí, quien quiera a optar a llevarse la pieza a casa deberá poner 400 euros para empezar a pujar. Las actividades infantiles y la exposición de productos locales completarán la oferta de un evento llamado a excitar las papilas gustativas de todo tipo de paladares.
Al oeste, en Valdegovía, la más que consolidada Feria de la Patata -la de este año va a ser su vigésimo primera edición- rendirá tributo el domingo al producto alavés por excelencia en la localidad de Bóveda. A las 10.00 horas, con el volteo de campanas, dará comienzo la fiesta con la Feria de Artesanía y el Mercado de Productores. Como siempre, se pondrán a la venta 20.000 kilos de las variedades kennebec y spunta, habrá juegos y talleres infantiles, un globo aerostático y se presentarán las últimas novedades de Neiker-Teknalia en investigación de patata. La música de la fanfarre Gesaltza, la clásica degustación gastronómica a cargo de Boilur y el homenaje a un personaje popular de la zona completarán la oferta en Bóveda.