En la cuadrilla de Josean todos están suscritos al grupo. Sólo hace falta un teléfono móvil con conexión a Internet y predisposición a colaborar para formar parte de esta singular comunidad. El resto es simple. Sólo hay que estar atentos y avisar, llegado el caso, de que el peligro acecha. Y en éstas andan desde hace meses los componentes de este grupo. Colaborando entre camaradas para evitar ser cazados por alguno de los radares ocultos -móviles y fijos- que la Policía municipal despliega por las calles de la capital. Ése es el objetivo de esta herramienta, un chat que pertenece a la comunidad whatsapp y que está formado en esta ocasión por una treintena de colegas que cada día recibe nuevos visitantes. Todos colaboran entre sí, con cierta periodicidad, y ahí radica el éxito de su extraordinario crecimiento, tanto a través de este tipo de aplicaciones, que son gratuitas, como en otras como Spotbros, Waze, Twitter o Facebook.
El fenómeno parece imparable. Basta echar un vistazo a Google y teclear chats + radares ocultos para toparse con 1,6 millones de resultados que ofrecen todo tipo de artefactos, estrategias y artimañas para burlar la ley. Si en la actualidad, precisamente por la inmediatez que permiten las redes sociales, la caducidad de las noticias es cuestión de segundos, ¿por qué iba a ser distinto con los controles sorpresa que la Policía instala en las carreteras para denunciar el exceso de velocidad, los controles de alcoholemia o los radares camuflados en vehículos oficiales?
Como no lo es y como existe una sensación generalizada entre los usuarios de que se trata de un acto de "pillería" más que de delito, los distintos grupos continúan en prealerta. Y así vuelve a activarse el iPhone de Josean, que en apenas unos minutos recibe varios mensajes advirtiendo del peligro. "Focus en Avenida de Los Huetos, frente a Mercedes". Recibido a las 13.26. En otro más vuelve a salir a escena el temido Focus gris de la Policía Municipal, que esta vez se encuentra en las inmediaciones del barrio de Borinbizkarra: "Focus en avd de Zabalgana a la altura de lauzurica en direccion Zabalgana" reza el mensaje, que dos horas después corrobora otro camarada del smart phone: "Sigue el focus de zabalgana". Y el cazador se convierte en presa.
En este ánimo de impulsar esta corriente de rebeldía social contra el "afán recaudatorio de la Policía", como denuncia un usuario, Spotbross (aplicación similar a whatsapp) pone a disposición de sus usuarios diferentes grupos, que denomina spot, para hablar sobre diferentes temas en zonas geográficas determinadas. Y como no podía ser de otro modo, también existen spots para tráfico del estilo Aviso de controles, donde la gente avisa en tiempo real de las incidencias que hay al respecto en su zona de influencia. ¿Y si no hay ningún grupo? Esta aplicación, que fue creada precisamente por un grupo de emprendedores vascos, ofrece la posibilidad de crear uno. "Es cuestión de tiempo que tengas un montón de seguidores", añade otro usuario.
Por norma, y sobre todo por la gratuidad de este tipo de apps, la gente está abonada a más de una de estas aplicaciones, lo que rebaja sustancialmente el riesgo de ser cazado por la Policía. Varios manuales distribuidos por Internet explican con toda precisión cómo hacerlo, y sus propios creadores tratan de implicar a los militantes de esta batalla contra los radares en la tarea de la innovación. "Si tenéis algún truco más, por favor compartirlo con nosotros dejándonos un comentario", reza un manual.