Madrid. Miguel Ángel Flores, propietario de la empresa Diviertt, organizadora de la fiesta de Halloween en el Madrid Arena, que terminó en tragedia, quedó ayer en libertad tras depositar una fianza de 200.000 euros.

Flores, que pasó la noche en las dependencias de la Policía Nacional en Moratalaz, pagó la fianza a las 17.50 horas, por lo que salió de los calabozos de Plaza de Castilla, en los que se encontraba desde que terminó de declarar, a las 16 horas.

Previamente, el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López Palop, que investiga la fiesta del recinto madrileño de la noche del pasado 1 de noviembre, en la que una avalancha provocó la muerte de cinco chicas, había decretado el ingreso en prisión provisional con fianza para el empresario, al que se le imputan cinco homicidios imprudentes, y además la retirada de su pasaporte por riesgo de fuga.

En la vistilla, Jorge Morales, el abogado del empresario, ya indicó ayer que en las próximas horas iba a depositar la fianza de 200.000 euros en el juzgado de guardia.

Tanto las acusaciones particulares, que ejercen las familias de las víctimas, como la acusación popular, representada por el colectivo Manos Limpias, solicitaron el ingreso en prisión de Flores, que fue detenido el jueves por riesgo de fuga y por posible ocultación de pruebas.

La Fiscalía pidió el mantenimiento de la obligación del empresario de comparecer en el Juzgado dos veces al mes, que el juez ordenó tras la primera declaración judicial de Flores el pasado 20 de noviembre.

Abdón Núñez y Felipe Moreno, abogados de las familias de dos de las víctimas, justificaron además su petición en la publicación de un vídeo por El Mundo en el que se aprecia cómo varias personas trasladan a un edificio próximo al Madrid Arena las urnas en las que se encontraban las entradas de los asistentes de la fiesta.

El recuento de las entradas de la fiesta del Madrid Arena hecho por el juez -tras hallar ocho urnas llenas de boletos en un pabellón anexo- arrojó una cifra de más de 16.700, lo que superaba en un 58% el aforo permitido para el evento.

La declaración de Miguel Ángel Flores, que se convierte en el primer imputado por estos hechos que ingresa en prisión, se prolongó durante más de tres horas y respondió a las preguntas de todas las partes, según fuentes jurídicas.

Flores ya compareció ante el juez el pasado 20 de noviembre, cuando culpó al Ayuntamiento y a la Policía Municipal de la tragedia y señaló a la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos como la encargada de contratar a la empresa que se hizo cargo de la seguridad de la macrofiesta.

La tragedia del Madrid Arena ha tenido también una vertiente política con la dimisión del que en ese momento era concejal de Economía y máximo responsable de Madrid Espacios y Congresos, propietaria del pabellón, Pedro Calvo, y las destituciones del consejero delegado y del gerente de esa entidad, José Ángel Rivero y Jorge Rodrigo.